Gaizka Mendieta (Lekeitio, 1974) ha llevado una vida tranquila en Londres desde su retirada hace trece años. Pocos futbolistas de su categoría adoptan un perfil tan sobrio como este mito del Valencia y de la selección española que acabó su carrera en el Middlesbrough. Fichado ... como colaborador del grupo Vocento para esta Eurocopa, Mendieta fue comentarista en Sky Sports y todavía ejerce como embajador de la Liga, pero su idea es volver al fútbol. Acaba de hacer un master en dirección deportiva y quiere labrarse un futuro como director deportivo o entrenador. Dice que está abierto a todo.
- Más que hablar de fútbol lo primero que se impone en este momento es hacerlo de la pandemia. Toda la preparación prevista ha saltado por los aires.
- Así es. La verdad es que es algo que no esperábamos. Después de las experiencias que ha habido en la Champions, en la NBA o en la Fórmula Uno parecía que la cosa iba a estar mucho mejor controlada.
- Vamos, que le han sorprendido los positivos.
- Pues sí, sinceramente. Yo pensaba que se ibana minimizar casi totalmente los riesgos para que no sucediese algo así en el último momento.
- Lo cierto es que, de un tiempo a esta parte España parece condenada a llegar a los grandes torneos en una situación de máxima inestabilidad. Ahora los positivos, en Rusia el despido de Lopetegui.
- Esperemos que no haya más sustos. Es evidente que todo los que afecte a la estabilidad de una planificación es malo, pero tampoco es algo definitivo. A veces la dificultades acaban reforzando al grupo. Ya lo vimos en el Mundial de Sudáfrica tras perder el primer partido con Suiza.
- En vista de la situación, ¿este modelo de Eurocopa en tantos países no le parece un riesgo excesivo? ¿No podía haber apostado la UEFA por celebrarla en un solo país y con todas las selecciones allí instalados allí, cada una en su burbuja?
- Hombre, igual podría haber sido una opción más prudente, pero creo que la UEFA piensa en que va a poder organizar un torneo seguro manteniendo las distintas sedes.
- El hecho de tener que cambiar los planes de entrenamiento y que Luis Enrique sólo pueda trabajar en pequeños grupos se antoja un inconveniente especialmente grave para una selección como la española, joven y necesitada todavía de forjarse como equipo. ¿Le preocupa?
- No. Está claro que no es lo ideal, pero creo que los futbolistas ya están acostumbrados a estas situaciones atípicas.
- Lo decía porque selecciones como Francia, Inglaterra, Bélgica o Alemania, al ser equipos más hechos y conjuntados, en principio sufrirían menos estas complicaciones.
- En este sentido, es verdad, pero por otro lado hay que tener en cuenta que Luis Enrique ha hecho muchos cambios en la selección, ha ido haciendo rotaciones, no ha tenido un once titular fijo. Y su equipo pese a todo siempre ha demostrado una gran competitividad.
De cara
- Usted ha sido compañero de Luis Enrique en el Barça y en la selección. ¿Qué piensa del asturiano como entrenador?
- A mí me encantaba como compañero y me encanta como seleccionador. Es un hombre con mucha personalidad, un estudioso que siempre está intentando introducir ideas y conceptos nuevos. Y luego por su forma de ser es una persona muy directa, que va de cara y te dice las cosas claras. Y eso es algo que todos los futbolistas aprecian.
- ¿Qué espera de España en esta Eurocopa?
- Yo soy optimista. Lo más importante es que, después de los últimos traspiés, hemos recuperado la ilusión en la selección. Más allá de debates por la lista, España ilusiona. Es un equipo dinámico, versátil y con talento. ¿A dónde llegará? Ya veremos. Será importante empezar bien contra Suecia.
- ¿Cuales son a su juicio los mayores virtudes y defectos de la Roja?
- Virtudes la variedad y calidad de jugadores, que le permite adaptar a diferentes sistemas. ¿Defectos? Pues quizá falta un poco de bagaje, eso que te dan los futbolistas veteranos. Después de la baja de Sergio Ramos, el positivo de Busquets hace daño en ese sentido.
«Luis Enrique me encantaba como compañero y me encanta como seleccionador»
- ¿Quiénes son sus favoritos?
- Pues los que están en boca de todos. Francia es la campeona del mundo y dispone de una plantilla impresionante y muy compensada. Alemania estará ahí, como siempre. Portugal es un equipazo, lo mismo que Inglaterra. A España la veo en el grupo de los favoritos.
- Hablaba de Inglaterra. Usted jugó cuatro temporadas en el Boro, vive en Londres y conoce muy bien el fútbol inglés. ¿Ve al equipo de Southgate con posibilidades ganar un título después de tantos años.
- Si Inglaterra es capaz de aprovechar la calidad individual que tiene para dar un gran rendimiento colectivo puede acabar ganando, sin duda. Otra cosa es que consiga ser un verdadero equipo, bien compensado
«Mi idea es trabajar en un club o en una federación»
-Vamos a su faceta más personal. Se retiró hace trece años tras quince temporadas al máximo nivel en el Valencia, el Lazio, el Barça y el Middlesbrough. ¿Se le hizo duro colgar las botas o se adaptó bien a la nueva vida?
- Bueno, al principio estás un poco viéndolas venir, pero luego empecé a colaborar en televisión. Y me gustó porque en Inglaterra se respeta mucho al exfutbolista. Luego también invertí en restaurantes. Soy socio en tres grupos, en dos de ellos con Nacho Manzano y Quique Dacosta.
-¿Le quedó alguna espina clavada en su carrera deportiva?
- Yo estoy muy contento de la carrera que hice. Jugué en grandes equipos, en las mejores ligas de Europa, gané títulos, fui internacional... ¿Espina? Pues mira, si algo me ha quedado ahí dentro ha sido no haber jugado en el Athletic. Hubo rumores durante varios años, que no sé si fueron verdad, pero al final no pudo ser y esa espina sí tengo.
- Pensaba que iba a referirse a las dos finales de Champions perdidas con el Valencia.
- También claro. ¡No me hagas elegir entre una cosa y otra, ja, ja! Llegar a dos finales de la Champions con el Valencia fue un éxito. Esto lo tengo que decir porque es verdad, pero mientras te lo digo me escuece la garganta. Hubiera sido increíble ganar alguna de esas finales.
- Es embajador de la Liga, ha sido comentarista en Sky Sport, y colabora en prensa. Digamos que sigue vinculado al fútbol, pero desde fuera. ¿No se ha planteado volver a trabajar en algún club?
- Sí, sí. Ese es precisamente el objetivo que tengo ahora. He hecho un master en dirección deportiva y mi idea es poder trabajar en algún club o en alguna federación.
- ¿Como entrenador o como director deportivo? ¿Se ve más como hombre de banquillo o en los despachos?
- La verdad es que no lo tengo claro. Estoy abierto a todo, a trabajar en una dirección deportiva, en el staff de un club o incluso como entrenador, aunque me falta el último carnet porque cuando iba a sacarlo llegó la pandemia.
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