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ignacio liaño
Sevilla
Martes, 22 de junio 2021, 16:44
La Eurocopa que sigue celebrándose parcialmente en Sevilla sigue moviendo multitud de gente en torno a la competición: miles de aficionados, centenares de voluntarios y otros tantos trabajadores cuya labor es conseguir que solo se hable del fútbol cuando acabe el partido. Todo el mundo ... quiere formar parte de algo histórico. No obstante, en una situación sanitaria como la que sigue atravesando España, resulta casi imposible evitar que pese a todos los intentos por salvaguardar la salud de las personas, haya pequeñas fugas de contacto en las que se puede coger y propagar la covid-19. Lo saben al menos cinco coordinadores, que han trabajado mano a mano con cientos de voluntarios en el torneo continental, y no se sabe si con el propio público, tras haber dado positivo por coronavirus horas después del España-Suecia que tuvo lugar el lunes de la semana pasada y al que asistieron 12.517 personas, según ha podido conocer ABC de Sevilla.
Hay que recordar que la selección española de fútbol vio peligrar su participación en el torneo antes de la puesta de largo tras el positivo de Sergio Busquets y el falso positivo de Diego Llorente, pero los dos internacionales dieron negativo en pruebas posteriores y ya están a las órdenes de Luis Enrique para afrontar el duelo decisivo de mañana frente a Eslovaquia que también se jugará en el coliseo cartujano (18.00 / Telecinco) al igual que estuvieron disponibles para el choque ante Polonia. La relación entre la situación sanitaria del vestuario nacional y la inquietud que ahora impera entre los cientos de voluntarios radica en que parte de ese equipo de trabajo que participa desinteresadamente en el torneo ha estado en contacto estrecho junto a los coordinadores que ya han desarrollado el virus. Y éstos, con el resto de participantes en el torneo, ya sean voluntarios o trabajadores, que podrían haber tenido algún contacto puntual con la expedición de la selección española o los jugadores seleccionados por Suecia y Polonia.
Fue el miércoles, dos días después del debut, cuando se les notificó a esas cinco personas que habían dado positivo. Razón por la que directamente se fueron a mantener la preceptiva cuarentena, y por otro lado se mandó la realización de un test general a todos los voluntarios, que trabajan repartidos por todo el recinto y otros puntos de la ciudad; pero no ha trascendido de ninguna forma si alguno de ellos también dio positivo, quedando afectado por la organización de dicho partido, ni se ha ofrecido explicación oficial por parte de la UEFA o de la Junta de Andalucía de cómo redunda esta situación al desarrollo de la competición, y por ende a la salud de todas las personas que estuvieron expuestas, interna y externamente, en ese primer encuentro de la Eurocopa en el que estuvieron presentes miles de aficionados.
Lo que sí se conoce es que algunas de esas cinco personas como un porcentaje de voluntarios habían permanecido días atrás al pitido inicial en el mismo apartahotel, situado en la localidad de Bormujos, donde compartían sitio de pernoctación, y, probablemente, zonas comunes y privadas del recinto hotelero. Se desconoce si la cuarentena la están realizando en ese mismo lugar, o cada uno de los que dieron positivos acudieron a sus domicilios en cuanto supieron que estaban incubando el coronavirus. Este periódico conoce los nombres y apellidos así como las áreas de trabajo de los cinco profesionales, como mínimo, que de forma fehaciente se ven inmersos en este nuevo problema sanitario que salpica al transcurso de la Eurocopa en Sevilla, pero obedeciendo a la Ley de Protección de Datos y asistiendo a su derecho a la privacidad, no serán publicados.
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