La Deportiva no se quiere descolgar

El objetivo está claro y cómo llegar hasta él, también. La Deportiva tiene en mente sus metas, sus funciones y cómo alcanzarlas. Y, para ello, no puede fallar ante uno de los rivales llamados a estar arriba pero que vive una situación irregular.

Íñigo Vélez se medirá a su pasado más reciente, el CD Lugo, este domingo (20:00 horas) en un El Toralín que arropará al equipo blanquiazul para, dos semanas después, volver a ganar y comenzar a ser un equipo mucho más fiable como local.

Porque, pese a esos 49 puntos que dan la tercera plaza momentánea a la Deportiva, su principal debe es su irregularidad en casa. Es algo que quieren corregir y saben que deben hacerlo. Para ello, el primer paso que pretenden dar es ante uno de esos equipos recién descendidos que estaba llamado a pelear el ascenso directo, pero está muy lejos de ello.

El Lugo, con nuevo entrenador, Roberto Trashorras, que disputará en Ponferrada su cuarto partido al frente del conjunto gallego, necesita ganar para no quedarse en tierra de nadie o, lo que es peor, más cerca del descenso que del playoff.

Los bercianos intentarán aprovecharse de esas dudas e inseguridades de los albivermellos en una temporada muy gris al otro lado de los Ancares y esperanzadora, pese a las críticas al estilo de juego, en la capital berciana.

Además, en Ponferrada hay buenas noticias. Dacosta y Cerdà llegarán a tiempo para este partido donde Vélez podrá volver a contar, dos meses después, con el central Kevin Sibille, clave en su esquema. La única duda es la de Mángel, que sigue con problemas físicos.

Con la necesidad de ganar para cambiar la dirección más inmediata de la nave blanquiazul, recuperar sensaciones y, quien sabe, si ganar posiciones en la tabla - si Deportivo o Nástic pinchan -, la Deportiva vuelve a su casa para tratar de convertirla en fortaleza.

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