La Deportiva coge aire

Necesitaban una bocanada de aire y llegó a tiempo. La Deportiva respiró, inhaló oxígeno y coge fuerzas para el tramo final de temporada. Los bercianos se gustaron ante la Segoviana con un rotundo triunfo (4-0) marcado por la expulsión de un jugador visitante a la media hora de juego que los de Javi Rey aprovecharon a la perfección.

Javi Rey necesitaba una reacción de su equipo y la buscó con una revolución en el once, ejecutando hasta seis cambios en su alineación inicial.

Sin Costa ni siquiera en el banquillo, optando por ser precavidos con el goleador madrileño, la Deportiva salió con la idea clara de dominar la posesión y atacar de forma constante y paciente, madurando el partido.

Avisó primero la Segoviana con un chut de Rodrigo desde la frontal. Pero fue un oasis en el desierto: la Deportiva monopolizó el balón y le faltó únicamente culminar las jugadas.

Los de Javi Rey lograron encerrar a los segovianos en su área, midiéndose a un rival que defendía en bloque medio-bajo y, pese a que concedían espacios incluso por dentro, no sufrieron excesivas ocasiones.

Una jugada personal de Yeray y un disparo desde la frontal de Esquerdo fueron todo el bagaje ofensivo de una Deportiva a la que, en estos primeros minutos, le faltaba culminar todo el buen juego realizado con peligro real.

Así, llegaron unos minutos de cierta locura, en los que el choque se abrió algo mas. La Segoviana avisó con una volea de Borrego en el rechace de un córner, pero su disparo acabó en los pies de Nóvoa.

Respondió la Deportiva con su mejor ocasión: Cortés cabeceaba al poste un gran centro de Bustos. Y, sin tregua, Farrell ganaba la espalda a Andújar para plantarse solo ante Andrés Prieto que, haciendo de la excelencia algo cotidiano, interpuso su pierna en el disparo del delantero visitante para evitar el 0-1.

Pero el partido cambió por completo a la media hora de juego. Yeray, en su enésima diablura, se internó en el área y Abel no tuvo más remedio que agarrarle. Pardeiro Puente señaló penalti y castigó la infracción con expulsión ante la airada queja del central segoviano. Cortés, desde los once metros, adelantó a la Deportiva.

Con el gol, el conjunto berciano bajó el ritmo del partido, controló el choque, tuvo una gran ocasión en la cabeza de Bustos y no concedió nada.

Realmente, sólo concedió una falta lateral que acabó con gol blanquiazul. En ese contragolpe, Yeray se quedó solo ante Oliva, chutó al poste y el rechace tocó en el visitante Astray, que replegó a todo gas y no pudo evitar el 'encontronazo' con el balón que supuso el 2-0 con el que se llegó al descanso.

La segunda mitad fue un asedio de la Deportiva en busca de más goles ante una Segoviana que evitaba que la sangría fuese a más. Los de Ramsés cerraron con cinco hombres ante un cuadro berciano que quería ese tercer tanto.

Ese gol acabaría llegando. Carrique puso un gran centro al segundo palo y Bustos, atento, se anticipó a la marca de Silva para cabecear a placer y poner el 3-0. El choque estaba siendo un festín para la Deportiva.

El conjunto berciano no bajó el pistón y quería más y más goles. Llegó rápidamente el cuarto en una gran acción de Yeray, que se giró y asistió a Bustos. El asturiano, con un chut cruzado, anotó el 4-0.

El partido bajó en revoluciones con una Segoviana que buscaba el gol del honor en El Toralín, un elemento positivo que sacar de su visita a Ponferada. Pero los de Javi Rey no querían concedérselo, ya que también necesitan sumar todos los inputs positivos posibles.

Uno de ellos era, por ejemplo, el estreno goleador de Pau Ferrer. El castellonense la tuvo en un gran centro de Yeray que el delantero no acertó a cabecear.

El conjunto berciano se gustó, disfrutó de estos últimos minutos en los que hasta la grada se apuntó a esta fiesta. La Deportiva cogió moral, fuerzas y ánimo para seguir en la batalla por consolidar su plaza de playoff y seguir soñando con un final de temporada ilusionante.

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