EFE
Miércoles, 4 de enero 2017, 00:10
Alcorcón y Córdoba, los dos únicos equipos de Segunda en los octavos de final de la Copa del Rey, afrontan con ilusión una eliminatoria que ambos, dentro de la dificultad, ven más factible que si les hubiera tocado un Primera para intentar acceder a cuartos.
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El conjunto madrileño, reforzado moralmente tras cerrar 2016 eliminando al Espanyol en Cornellá-El Prat, inicia este nuevo año con mucha ilusión y con el objetivo de sentar las bases de un proyecto deportivo a largo plazo con la renovación por dos temporadas de su técnico Julio Velázquez. El entrenador salmantino, que sustituyó hace apenas dos meses y medio al destituido Cosmin Contra, ha logrado cambiar la cara del conjunto alfarero acompañándolo de resultados y de juego.
En Santo Domingo, el Alcorcón no pierde un partido oficial desde el 20 de septiembre, precisamente contra el Córdoba en Liga, y desde entonces suma siete encuentros en los que ha sumado cinco victorias y dos empates, uno de ellos en la anterior ronda de la Copa frente al Espanyol. A esa fortaleza como local apela el conjunto madrileño para seguir progresando en una competición que le ha dado en los últimos años grandes alegrías, como cuando eliminó al Real Madrid en 2009 o recibió al Athletic en 2010 o venció al Espanyol en 2014.
Para este encuentro, Velázquez cuenta con alguna duda que no anunciará hasta el último momento, aunque sí ha desvelado que seguirá confiando en gran parte de los futbolistas que actuaron en el choque contra el Espanyol.
Por su parte, el Córdoba accedió a octavos tras eliminar en la anterior ronda a un Primera como el Málaga, al que no sólo ganó en El Arcángel (2-0), sino que también fue capaz de derrotarle en el partido de vuelta en La Rosaleda por 3-4.
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Con ese último triunfo, el Córdoba cuenta sus partidos por victorias como visitante desde la llegada de Luis Carrión al banquillo en sustitución de José Luis Oltra: la del Málaga y las dos ligueras en Reus (1-2) y Oviedo (1-2).
Los blanquiverdes acumulan seis sesiones de trabajo desde que retornaron a los entrenamientos el pasado 29 de diciembre y cuentan con las bajas del central Héctor Rodas, que no se ha recuperado de la lesión en el hombro que sufrió en Málaga y ha sido sustituido por el canterano Pablo Vázquez; y del congoleño Jonathan Bijimine, concentrado con su selección para la Copa de África.
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Las principales dudas para formar el once inicial estarán, por tanto, en defensa, donde sólo es segura la presencia del capitán Luso reconvertido en zaguero, que formará pareja de centrales con Vázquez o con José Antonio Caro
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