El Astorga roza la proeza en la Albuera pero acaba cayendo con 'diez'

Era partido de altos vuelos y así lo demostraron hasta que el árbitro intercedió. La 'Sego' lo buscó primero, con dominio territorial y acercamientos con cierto peligro sobre la meta maragata.

Berlana tuvo que intervenir con una buena parada en la primera acción clara del bando gimnástico. La grada cantaba el gol cuando el portero desvió el esférico a saque de esquina.

Respondió antes de la media hora el Atlético Astorga. Javi Amor se plantó solo ante Facundo y entre el portero y Anel lograron evitar el tanto en el mano a mano del delantero con el cancerbero.

El guión del espectacular choque lo cambiaba Laín Pérez. El colegiado soriano decidió expulsar a Diego Peláez al mostrarle doble amarilla, la primera por una dudosa falta y la segunda por interceder en el saque de una falta que botaba la Gimnástica Segoviana.

La segunda parte guardaba varias vueltas de tuerca a un partido al que los hombres de Miñambres no le perdieron la cara. La tuvo Mika, por el bando local, sin embargo logró golpear con un hombre menos el Astorga.

Un penalti decretado por el colegiado fue transformado por Roberto Puente en el 0-1, al paso por el minuto 58, lo que ponía patas arriba la Albuera.

El tanto despertó a la Segoviana, que aprovechó su superioridad para dar la vuelta al marcador en un abrir y cerrar de ojos. Fueron tres minutos, entre el 70 y el 73, los que tardaron los anfitriones en revertir la situación. Primero Anel, y después Kike, lograban los dos goles que daban ventaja al conjunto local.

Demasiado castigo para el Astorga, que había dado la cara con diez jugadores y se veía por detrás en el tanteador. La esperanza la daba Dani Calleja, que desaprovechaba un penalti a favor de los segovianos en la recta final del partido.

Pero, finalmente, los maragatos no pudieron con el oficio gimnástico y se mostraron incapaces de generar situaciones claras de peligro y hacer la igualada, lo que deja descolgado al equipo de los primeros puestos.