Pogba vuelve al United y se convierte en el fichaje más caro de la historia

El entrenador del Manchester United, el portugués José Mourinho, ya había dado a entender esta semana la inminente llegada de Pogba. «Sí, tengo 22 jugadores y vamos a tener 23», señaló el mediático técnico luso cuando fue preguntado por el fichaje de Pogba.

El fichaje de este portento físico marca así un cambio generacional en la plantilla de los diablos rojos, que han formado un proyecto lleno de jóvenes jugadores como Darmian, Schneiderlin, Daley Blind, Mkhitaryan y ahora el propio Pogba.

El galo pasaba el reconocimiento médico el mismo día en el que sus nuevos compañeros disputaban la Community Shield contra el Leicester City. La cuantía del traspaso llegó a ser calificada como «completamente una locura» por el entrenador del Arsenal, Arsene Wenger.

Contratiempo para 'Zizou'

El aterrizaje de Pogba en Old Trafford supone un contratiempo para el técnico madridista Zinedine Zidane, ya que deseaba el fichaje de su compatriota y así se lo hizo saber a la cúpula del club blanco. Por su potencia, juventud, versatilidad y capacidad de mejora, le consideraba el jugador ideal para su primer proyecto a curso completo en la élite del fútbol.

Sin embargo, Florentino Pérez no estaba por la labor de desembolsar esta millonada por el ex de la Juventus. Tanto él como sus asesores consideran que el centro del campo del Real Madrid está muy poblado de jugadores y equilibrado, y más tras el buen desempeño en pretemporada de Marco Asensio, con grandes opciones de quedarse en la primera plantilla.

El máximo mandatario blanco, que salvo sorpresa final no acometerá el fichaje de ningún galáctico por segundo año consecutivo, considera abusivo el precio en el que tasó la Juventus a Pogba. Y, sobre todo, no estaba dispuesto a pagar una comisión récord del 25% del montante del traspaso al agente Mino Raiola.

El representante italiano ya ha conducido al United a Ibrahimovic y a Mkhitaryan por 42 millones, y sólo por el traspaso de Poba percibirá en torno a 30 millones. Florentino Pérez no comulga con las formas e imagen estrafalaria de este antiguo pizzero que dejó el restaurante familiar para competir incluso con el magnate portugués Jorge Mendes.