El pasado fin de semana, Juan Dávila, el famoso cómico madrileño y exagente de Policía Nacional, llenó dos veces el Teatro Carrión de Valladolid con su espectáculo 'El palacio del pecado 2.0'.
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Dos funciones con todas las entradas agotadas donde el humorista no solo hizo reír al público, sino que también sorprendió con una inesperada conexión con el fútbol leonés.
El viernes 17 de enero, Dávila invitó al escenario a dos jugadores de la Cultural y Deportiva Leonesa: el extremo derecho Carlos Calderón y el lateral izquierdo Álvaro Martínez, quienes acudieron al espectáculo. Los jugadores participaron en varias bromas del show, comenzando con la entrega de una camiseta de la Cultural personalizada con el nombre del cómico, gesto que arrancó los aplausos del público leonés presente.
Antes del partido
Entre risas, Dávila preguntó contra quién jugaban ese fin de semana, a lo que respondieron que se enfrentarían al Lugo, partido que finalmente terminó con un 1-4 a favor de la Cultural.
Aprovechando la situación, el humorista les preguntó si iban a jugar en ese encuentro. Calderón bromeó diciendo que solía estar «más en el banquillo», mientras que Martínez respondió con un «posiblemente». Fue entonces cuando Dávila decidió llamar, en plena función, al entrenador del equipo, Raúl Llona, para despejar dudas.
«Están haciendo terapia, míster»
El técnico respondió la llamada desde casa, viendo la televisión. En un tono relajado, Dávila le dijo: «Tus jugadores están aquí conmigo haciendo terapia para que la gente se ría».
Llona, entre risas, afirmó que ya sabía dónde estaban y no dudó en bromear asegurando que Calderón estaba «descentrado desde su matrimonio». El cómico aprovechó para vacilarle sobre si sacaría a jugar a sus jugadores, asegurando que «siempre que subo a alguien al escenario, luego rinde en el campo». «Mira Sergio Ramos, que ganó su único partido después de mi show», broméo
El entrenador cumplió su palabra, y ambos jugadores acabaron participando en el partido del fin de semana. Álvaro Martínez disputó los 90 minutos del partido, mientras que Carlos Calderón saltó al terreno de juego en el minuto 71 y jugó 19 minutos.
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Más humor y «complicidad» en el escenario
La interacción no quedó ahí. Álvaro Martínez fue también protagonista de una de las bromas más comentadas del espectáculo, cuando fue invitado a participar en una «cita» improvisada en directo, aunque decidió no hacerlo al tener pareja.
El show de Dávila no dejó indiferente a nadie, como lo reflejó en sus redes sociales, donde mostró a sus más de 2,2 millones de seguidores en Instagram la camiseta de la Cultural que le regalaron los jugadores y otra con el lema 'Corazón de León'.
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Muchos leoneses acudieron a Valladolid para disfrutar del espectáculo, que destacó por mezclar humor y un inesperado homenaje al fútbol leonés.
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