Sierra y Solís se asientan como 'cerebro' de la Cultural

Alberto Solís ha empezado a brillar, a rendir como se esperaba del sevillano en las últimas jornadas, apoyado y acompañado del fichaje invernal que mejor está rindiendo, Jaime Sierra, inamovible - salvo por su expulsión ante el Badajoz - del esquema de Curro Torres.

Las sensaciones hablan del gran rendimiento de estos dos jugadores ante el Calahorra, especialmente tras el gol de Ketu, el primero de la tarde, después del que la Cultural despertó. Hasta entonces, el equipo leonés estaba aletargado, sin encontrar líneas de pase ni desmarques.

Pero con ese tanto, se 'destapó' el conjunto culturalista y, con él, Solís y Sierra. Ambos firmaron unos grandes números de acierto en el pase que corroboran la sensación de que hicieron un partido de notable alto. Solís completó 35 de los 42 pases que intento (83%), mientras que Sierra rozó la perfección con 24 de 25 pases intentados.

En los envíos atrás estuvieron infalibles (10 para el sevillano, sólo cuatro para el madrileño), pero estuvieron brillantes también en los pases hacia adelante y en los envíos en el último tercio de campo. En el primero de los baremos, Solís firmó un acierto del 85% (11 de 13) por la totalidad de éxito en estos pases de Sierra. El madrileño también acertó los dos pases en el último tercio de campo, donde el sevillano sólo erró uno de los 9 intentados.

Este enorme acierto en el pase se complemente con otros aspectos como los duelos, donde Solís ganó la mitad de los librados (cinco de diez) y Sierra más de tres cuartos de los mismos (10 de 13), siendo también efectivos en el regate: el sevillano completó el que intentó, Sierra sólo salió perdedor en uno de los cuatro ejecutados.

Los dos tuvieron peso en el juego, recibiendo 27 y 17 balones, respectivamente, pese a no encontrarse mucho entre ellos: Solís solo pasó cuatro veces a Sierra por las dos en las que esta conexión se realizó en la dirección contraria.

A ello hay que sumar la seguridad que dieron con balón, perdiendo muy pocos balones (10 en el caso de Solís, dos para Sierra) y la importancia en la recuperación de balón y, en especial, en la presión, que tuvieron ambos. El sevillano robó todos los balones en campo rival (cinco) mientras que Sierra cerró el partido con cinco recuperaciones, dos de ellas más allá del centro del campo.

Son una pareja que empieza a consolidarse y busca su complemento ideal, 'batalla' en la que Angong, tras una destacada actuación el pasado sábado, también toma parte para ser la 'tercera pata' de un cerebro de la Cultural que ya tiene a Solís y Sierra como partes activas.