Hasta el final, sí Cultural

Sufría la Cultural en Urritxe. Un penalti, a todas luces injusto, había servido para que el Amorebieta se adelantara en el marcador justo antes del descanso. Los leoneses, en un partido gris, en el que les costó mucho encontrar su juego, habían apretado en los minutos finales, pero el gol no llegaba.

Pero esta Cultural, con alma de campeona, de equipo grande y que tiene la virtud de, hasta en sus peores días, sacar algo positivo, volvió a sacar su 'estrella' en los minutos finales de partido. No es la primera vez esta temporada y, de hecho, se está comenzando a convertir en una seña de identidad del equipo leonés.

En lo que va de temporada, y sumando el punto logrado ante el Amorebieta, la Cultural ya ha conseguido hasta seis puntos en los minutos finales de partido con cuatro goles en el ocaso del encuentro: dos sirvieron para ganar, dos para empatar.

El primer encuentro donde la Cultural alcanzó premio en el tramo final del partido fue en la tercera jornada, en la visita al Zamora, en el que Luis Chacón, en el minuto 89, dio la victoria a los leoneses, sumando así dos puntos más de los que lograba provisionalmente en el Ruta de la Plata.

Hubo que esperar un mes para que llegara otro postrero gol que diera puntos a la Cultural. Fue en la jornada 7, ante el Tarazona en el Reino de León cuando Txus Alba, en la última acción del encuentro, completó la remontada (2-1) y dio otros dos puntos más a los leoneses.

Los dos últimos goles tardíos que han dado puntos a la Cultural han sido a domicilio. El más épico, quizá, se dio en Andorra: la Cultural encajó el 1-0 en el minuto 89, pero logró empatar, por medio de Satrústegui, en el tiempo añadido (1-1) para sumar un punto en el Principado. Este fin de semana, en el minuto 89, fue Rodri quien dio otro punto, también en un saque de esquina, a la Cultural.

Y es que los córners son otro elemento en común para estos goles tardíos que dan puntos, ya que los tantos conseguidos ante Tarazona, Andorra y Amorebieta han nacido en saques de esquina.

A todos estos goles cabría sumar el 2-0 ante la Ponferradina, obra de Antón Escobar en el tiempo añadido, si bien es cierto que no supuso ningún punto extra para la Cultural (ya ganaba 1-0) y sólo sirvió para sentenciar el encuentro. E, incluso, se podría decir que nace de un córner, pero esta vez en contra, a través del cuál se monta el contragolpe que acaba en el tanto del delantero de Nigrán.

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