«Si estás feliz, se nota en el campo. Aquí disfruto jugando y he encontrado mi lugar»

Llegó la pasada temporada siendo uno de los primeros fichajes de la 'era Llona'. Su procedencia, el Osijek croata, generaba dudas. Pero Diego Barri (1995), con fútbol, calidad táctica y compromiso, ha disipado cualquier atisbo de las mismas para ser uno de los futbolistas más queridos por la afición culturalista.

Clave en el centro del campo, con capacidad de sacar la pelota jugada, de ganar duelos, de recuperar balones y de hacer coberturas ahora, incluso, ve portería y suma dos goles este curso. Hasta el mes de abril, cuando anotó ante el Nástic, no había marcado como jugador sénior.

Ese es el resumen del momento de Barri: dulce, dulcísimo. Después de un verano donde su renovación fue la que más se demoró, sigue en León, ilusionado e ilusionando para tratar de olvidar que la temporada pasada fue buena, pero no tanto como hubiera deseado.

¿Cómo estáis viviendo este gran momento? Ya habéis entrado en la historia del club

Somos conscientes de que lo que estamos haciendo es es algo fuera de lo normal y lo vivimos con mucho orgullo porque entramos en la historia de un club con 101 años de historia como este.

¿Esperábais empezar tan bien?

Esperaba empezar bien, pero creo que esto no se lo esperaba nadie. Es un inicio casi perfecto y es muy difícil de lograr. Miras hacia atrás, ves lo que hemos logrado… y es muy complicado. No creo que nadie pensar que íbamos a poder conseguir esto. Insisto, estaba estaba convencido de que íbamos a empezar bien, pero tanto yo creo que nadie se lo imaginaba.

¿Y cómo se puede explicar?

Desde el verano se han hecho las cosas muy bien por parte de la dirección deportiva. Se ha hecho un trabajo espectacular junto con el cuerpo técnico para la concepción de la plantilla. Esa apuesta por esa base del año pasado, apostar por la continuidad del entrenador y de varios jugadores nos ha dado ese punto de ventaja respecto a otros equipos que, quizá, han tenido más cambios. Y el trabajo de 'Manza' [José Manzanera, director deportivo de la Cultural] con las incorporaciones ha sido buenísimo. A partir de ahí está el trabajo diario, que está siendo muy bueno, con una gran mentalidad y una muy buena ética. Todos estamos comprometidos con el proyecto.

¿Qué notas que ha mejorado más respecto a la temporada pasada?

La idea del míster la teníamos ya, pero creo que esta temporada tenemos más recursos y el equipo ha dado un paso adelante. La temporada pasada nos costaba mucho a partir de tres cuartos, es cierto, pero han llegado refuerzos de mucho nivel en esas posiciones y nos están saliendo las cosas. Creo que ahí nace ese salto de calidad para poder conseguir los resultados que estamos consiguiendo.

¿Y qué fichaje te ha llamado más la atención?

A muchos ya los conocía o bien por haberme enfrentado a ellos o por haber jugado a su lado, como en los casos de Manu Justo y Sergi Maestre. No me sorprende ninguno de los dos, ya sabía lo buenos que son. Pero sí es cierto que teníamos todos esa expectativa de ver a Luis Chacón después de todo lo que se generó a su alrededor. Decíamos; 'a ver si es verdad que es para tanto', por decirlo así. Y lo ha demostrado. Es diferencial y lo demuestra en cada entreamiento y en cada partido.

Parece que no le ha podido la presión de todo eso que se generó con su llegada

Porque es un jugador muy inteligente y muy normal. Tiene los pies en la tierra, vive todo con normalidad y no es un chaval alocado al que se le vaya la cabeza y se crea más de lo que es. Esa es su parte positiva, que tiene la cabeza bien amueblada y se demuestra en esa capacidad para gestionar las expectativas y dar el rendimiento tan alto que está dando.

Andorra y Ponferradina. Llegan dos partidos muy duros que, ¿cómo os tomáis?

Con toda la normalidad que se puede. Sabemos que son dos partidos ante rivales muy potentes de la categoría, dos de las mejores plantillas, pero no debemos volvernos locos. Vamos a Andorra a ganar, a buscar los tres puntos y hay que tomárselo como un partido más. Sabemos que va a ser muy complicado, pero no creo que tengamos que demostrar nada a nadie a estas alturas.

El de Andorra era, en verano y sobre el papel, el viaje más difícil de la temporada. ¿El empate sería buen resultado?

Eso lo va a marcar el discurrir del partido. A día de hoy te diría que no, porque queremos ir a ganar. Eso ya te habla del nivel del equipo.

Si alguien tiene presión, es el Andorra

Sí, nosotros vamos con mucha tranquilidad, es algo que nos da todo lo logrado hasta ahora. Tenemos el poso de estar a ocho puntos de diferencia y, si ganamos, serían 11. Si perdemos, no se acaba el mundo: aún tendríamos cinco de ventaja. La situación en la tabla te da esa tranquilidad, pero sólo pensamos en ir a ganar con nuestras armas.

¿Cómo es eso de jugar a las 15:30 horas?

Sabemos que es algo que no está en nuestra mano y hay que intentar adaptarse a ello lo mejor posible, ya sabemos quien manda. He tenido horarios muy raros a lo largo de mi carrera como este, a las 14:00 horas… No son los mejores ni para el futbolista ni para el aficionado, pero mandan las televisión. Hay que intentar no pensarlo ni desgastarse en algo que, desde nuestra posición, no podemos cambiar.

Hablemos de ti, ¿estamos viendo tu mejor versión?

Me siento en mi mejor momento en todos los aspectos. Estoy contento en la ciudad, en el club, feliz con los compañeros y el cuerpo técnico… y todo esto se refleja en el campo. Estoy en una edad muy buena (29 años) para sacar todo lo que llevo dentro y también tengo cierta experiencia que a nivel personal me hace sentirme en plenitud. Creo que sí podría decir que estoy en mi mejor momento.

E incluso haces goles

(Risas) Sí, ya llevo un par de golitos... He tenido esa suerte y ojalá que no se quede ahí y pueda marcar alguno más y ayudar al equipo.

Tú también eres uno de esos jugadores que llegó a tocar Primera División, pero no pudo quedarse. ¿Cómo se gestiona?

Es duro, porque te suele pasar muy joven. Llegas, cumples tu sueño como futbolista y te das cuenta que lo realmente difícil es lo que han hecho todos los que están ahí arriba: mantenerse. Luego estuvo dos temporadas en Segunda y, cuando salí del fútbol profesional, me costó mucho. Me fui al Badajoz y tuve un bajón muy grande a nivel mental. Como decía Pibe con vosotros, no es fácil gestionarlo y creo que todos hemos necesitado ayuda externa, tanto de profesionales como de nuestra gente cerca para poder poner los pies en la tierra de nuevo y darte cuenta que este es un camino largo. Y aquí estamos todos, peleando por volver al fútbol profesional.

Imagino que son experiencias que, a la larga, os hacen más fuertes

Pienso que sí, porque todo esto es un proceso. Vas adquiriendo esa madurez y esas experiencias y siempre puedes sacar algo positivo, te lleva a aprender y acabas consiguiendo ser más fuerte mentalmente y te creas una coraza que te ayuda mucho.

Y llegas a León donde, no sé si has encontrado estabilidad, paz mental… que te está ayudando a sacar esa mejor versión que mencionabas antes

Desde el primer día que llegué, me he encontrado muy cómodo aquí. Además, soy de aquí cerca, de Salamanca y el club nos da todas las facilidades. Siempre se han portado espectacular con nosotros, muy cercanos en todos los sentidos y eso se refleja en el campo. Si estás feliz, se nota en el juego. Y si la idea del entrenador te ayuda a disfrutar jugando… Aquí estoy logrando disfrutar jugando.

Viajamos hasta el verano. Tu renovación fue la que más se demoró. ¿Cómo fueron esas conversaciones y cuándo tienes claro que querías seguir en la Cultural?

Desde el principio, les dije que la Cultural era mi prioridad, pero que necesitaba un pequeño tiempo de reflexión. Y tanto Manza como Llona lo respetaron. Siempre piensas en que puedas tener ciertos intereses de Segunda y, además, necesitaba parar un poco para pensar. Tenía claro, insisto, que esta era mi prioridad porque estoy muy feliz aquí y me transmitieron que el proyecto para este año iba a ser para estar arriba y buscar el ascenso. Es cierto que llegaron intereses, alguna oferta que en algún momento me hicieron dudar, pero al final me decidí por quedarme.

¿Hubo ofertas de Segunda?

No llegó a haber una oferta como tal, pero sí que se dieron bastantes contactos y conversaciones. Al final, y hablando con Manza, decidí que no quería esperar más, que quería estar tranquilo o poder acabar las vacaciones centrándome en disfrutar, porque todo esto te hace tener la cabeza en otro sitio y necesitaba un tiempo de desconexión.

Fue muy comentada aquella foto con Calderón y el mensaje 'se queda'. ¿Ahí estaba todo firmado o todavía no?

No, ahí todavía no. Fue por hacer la broma de que estaba muy cercana, porque es cierto que en ese momento estaba todo bastante avanzado porque, si no, tampoco lo hubiéramos hecho. Estaba con Álvaro, Calderón y Escudero y estabámos con la tontería de que sólo quedaba yo por renovar, de que si me iba a quedar… y la foto fue una especie de vacile. No va a más, son tonterías entre amigos y ahí se queda.

En la decisión de quedarte, ¿cuánto pesó ver que tantos compañeros seguía y la espinita de no haber podido alcanzar los puestos de playoff?

Mucho. Hablábamos prácticamete a diario y he tenido conversaciones con Quique Fornos, Bañuz, Bicho… y adquirimos el compromiso de quedarnos e intentar sacarnos esa espina. Salieron las coss bien, pero no tanto como queríamos. Nos faltó cerca para poder lograr el objetivo y nos quedamos porque realmente sentíamos que podíamos lograr esa meta.

Por último, ¿cómo gestionais este momento de euforia para tener los pies en el suelo?

Lo que hemos hablado es intentar aislarnos de todo lo que se dice alrededor nuestro y centrarnos en lo que vivimos en el día a día. Aunque suene a tópico, hay que ir partido a partido, sin mirar lo que dicen unos u otros, la clasificación ni las redes. Estamos consiguiendo algo que es muy bonito, pero hay que dejarlo a un lado y centrarse solo en lo siguiente, sin desviarnos. Tenemos que vivir el camino, el día a día, y no irnos más allá.

• Temas
• Cultural y Deportiva Leonesa