Curro Torres: «La Cultural no es una plaza fácil, hay mucha exigencia y el escudo pesa. Hay que estar mentalmente preparado»
Curro Torres hace balance de la temporada de la Cultural ·
El técnico de la Cultural hace balance de la temporada, donde se muestra «con la conciencia tranquila» por el trabajo hecho pero «insatisfecho» por el resultado | Torres reconoce que no ha hablado con el club sobre su continuidad: «Hay tiempo, es cuestión de confianza»
Fin a una temporada difícil, complicada en una Cultural y Deportiva Leonesa que no ha cumplido los objetivos previstos. Es más, ha estado lejos de esos puestos de playoff, de esas 'áreas de la ilusión' en las que la afición exige estar por entidad, ... historia, masa social y cualquier tipo de baremo.
Con el punto y final al curso, es hora de hacer análisis, balance y tirar de retrospectiva. El entrenador de la Cultural, Curro Torres, analiza su paso por el club leonés, desde esa llegada fugaz en la última semana de competición de pasado año 2021, con su debut ante el Leganés en Copa del Rey (2-3) y esa marcha irregular que ha acompañado al conjunto culturalista todo el campeonato y que le ha privado de pelear por cotas mayores.
Con la conciencia tranquila porque, asegura, ha trabajado duro, pero sin estar satisfecho por el resultado, Curro Torres hace su particular balance de una temporada, a todas luces, complicada en el plano deportivo.
¿Qué sensación le ha dejado la temporada?
Lógicamente, después de haber conseguido un objetivo menor, estás algo más tranquilo. Pero no satisfecho en el cómputo general de lo que se podía prever. No hemos sido capaces, lo hemos intentando pero no han llegado esos resultados que nos acercasen a situaciones mucho mejores en la clasificación y a estar en los últimos partidos con una situación mucho mejor.
¿Era el club lo que pensabas, lo que imaginabas antes de llegar?
Sí, sí. Desde fuera, se ve a la Cultural como un club grande, de esos que no entiendes el motivo por el que no ha estado en el fútbol profesional durante muchos más años. Este es un lugar ideal para trabajar y poder crecer y lograr objetivos tanto individuales como colectivos. Deseo que pueda estar donde tiene que estar una ciudad y un club como este.
Y con una afición exigente.
La afición me ha respetado mucho en todo momento y estoy agradecido por ello. Es lógico que estén decepcionados y molestos por la temporada, no ha sido como se esperaba. Y tienen todo el derecho a mostrar su desacuerdo en momentos puntuales. A mí, esa exigencia me motiva. Tener a gente que te exija en el plano profesional, que te mantenga alerta es positivo. Es cierto que el futbolista que venga a la Cultural tiene que tener esa capacidad para soportar la presión. Pero es algo que se puede llevar. La afición pide un esfuerzo, un trabajo y un compromiso por el club que luego agradecen.
«Es lógico que el aficionado esté decepcionado y molesto y tiene derecho a mostrar su desacuerdo. A mí, esa exigencia me motiva»
No se les ha dado lo que esperaban
No, es cierto. No ha sido por trabajo, puesto que se ha trabajado bien, pero los resultados son los que son. Nos examinamos cada semana y la verdad es que, cuando podíamos dar ese paso adelante en la clasificación, no hemos sido capaces de darlo.
Ya que habla de examinarse, ¿qué nota se pone?
Prefiero que la nota me la pongan otros. Hemos trabajado de la mejor forma posible, con entrega y dedicación y, pese a ello, los resultados no se han dado. El responsable soy yo, no lo hemos conseguido. En ese sentido, no puedo estar satisfecho, pero sí tranquilo con mi conciencia. Estoy satisfecho con el trabajo, pero no con el resultado.
¿Cuál es la razón para que no hayan llegado esos resultados?
La clasificación, durante toda una temporada, te pone donde mereces. Hemos cometido muchos errores a nivel individual que nos ha mermado a nivel de confianza y de ir creciendo. Si revisas todos los partidos en los que has cometido esos errores, te das cuenta de la merma que sufres para lograr meterte en una zona más alta de la tabla y estar más cómodo, con otra mentalidad y sin tanto sufrimiento, evitando tantos vaivenes de irregularidad.
«Hemos cometido muchos errores individuales que nos han ido mermando la confianza»
Da la sensación de que el equipo ha fallado en momentos donde se podía acercar a la zona de playoff como, por ejemplo, el partido en Majadahonda.
Sí, son varios momentos, no sólo ese partido contra el Rayo Majadahonda. Creo que no hay tan mala plantilla como para haber sufrido tanto, pero los caminos que hay en cada semana se han ido complicando. No pudimos dar ese paso en su momento y haber acabado con siete u ocho puntos más de los que tenemos, lo que nos hubiera llevado a otra situación que sí podíamos haber logrado por plantilla.
Decía Rícar Pozo en su despedida que estos jugadores no han demostrado todo lo buenos que son.
Estoy de acuerdo con esas palabras, así lo hemos hablado en varias ocasiones y lo he transmitido públicamente. No se trata de una cuestión de los futbolistas, pero todos tenemos nuestra responsabilidad: yo por no sacarles el máximo rendimiento, pero ellos también tienen su parte. Ahora hay que analizar y ver dónde nos hemos equivocado, qué se puede mejorar, porque la Cultural es un club exigente que tiene el nivel suficiente como para estar en el fútbol profesional. Pero hay que hacer las cosas bien, esas metas no llegan únicamente por la entidad del club, sino haciendo bien las cosas en el día a día.
¿Qué falla para que los jugadores no saquen su máximo rendimiento?
Es posible que se de una situación en la que jugadores que no estén en León el año que viene, que cambien de equipo, muestren otro nivel. La Cultural no es una plaza fácil, hay mucha exigencia y el escudo que se lleva pesa. Hay que estar mentalmente preparado. También ha pesado el hecho de no mantener una regularidad esta temporada, no lo hemos conseguido.
¿Ha sido la defensa uno de los lugares por los que más puntos se han perdido?
No lo quiero centralizar en un área del campo, porque defendemos desde arriba y atacamos desde abajo. Todos somos responsables de ello, desde los que más minutos han tenido hasta los que han tenido pocos. La palabra 'equipo' conlleva que lo bueno lo disfrutamos entre todos y lo malo lo asumimos el grupo entero.
Parece que a Curro Torres le ha costado encontrar su once de gala.
No me gusta hablar de once de gala, de aquellos que tienen más o menos participación. Yo creo en que todos los que están en el día a día son partícipes de que el equipo pueda rendir el fin de semana. Llegamos a León en una situación complicada en la que el equipo recibía muchos goles. Intentamos mejorar esas estadísticas y por un tramo de partidos lo logramos. Pero, durante el desarrollo del cambio de sistema, hubo algún desequilibrio. Creo que en las últimas siete u ocho jornadas ha habido partidos donde merecimos un poco más, pero con el ambiente negativo que había costaba ver más allá del resultado.
Esos cambios de sistema, imagino, iban encaminados a dar más seguridad en defensa
No soy tanto de sistema o dibujo y sí de idea o modelo de juego. En estos últimos partidos lo hemos encontrado, por ejemplo en Talavera. Hemos demostrado lo que podemos hacer cuando tenemos esa presión, estando más tranquilos. Se vieron bastante cosas que me gustaron. Ha sido un trabajo de tiempo, de adaptarnos a todo lo que ha ido sucediendo y aportar lo que nos gustaba. Este proceso se asemeja un poco más a lo que tenía en mente.
¿Hubo algún momento en el que se temió, incluso, por mantener la categoría?
No, no. Siempre lo dije: éramos nosotros los que estábamos en la situación más aventajada, los que dependíamos de nosotros mismos. Pero entiendo ese pesimismo generalizado, porque la temporada no ha sido buena. Tras el empate contra el Dux, se habló que la permanencia nos la dio la derrota del Talavera sin contar que ese punto logrado por nosotros fue clave. Todo depende de la manera en la que se vean las cosas. Las derrotas de los demás te hacen sumar, lógicamente, pero lo que haces tú también. Estábamos tranquilos, pero todos queríamos evitar llegar a Talavera con una situación más ajustada.
«Entiendo el pesimismo generalizado, pero no temimos nunca por la permanencia»
¿Ha habido algún jugador que le haya sorprendido, que no tuviera excesivamente controlado?
No conoces tanto a los canteranos, a los jugadores más jóvenes. Cada uno tiene su cosa, tienen características buenas. Me quedo con la actitud de todos, con el respeto mostrado y que he tratado de tenerlo yo también. Ha habido una buena relación y una buena comunicación, tratando de llegar al futbolista de alguna forma.
¿Qué sensación le ha dado la cantera de la Cultural?
Se me acusó en momentos puntuales de no contar con la cantera y siempre hemos contado con ellos. El club está haciendo una gran labor en la base y vienen jugadores interesantes que, en el futuro, pueden ser parte importante del club. Se deben poner sobre la mesa dos cosas: por un lado el rendimiento que hay que obtener cada semana y por otro el intentar involucrarte en el crecimiento de los futbolistas más jóvenes. No he tenido reparo en poner a los canteranos porque no me fijo en la edad: si están listos, hay que darles minutos.
Ya que mencionamos el futuro del club, ¿la Cultural le ha comunicado algo acerca de su futuro?
De momento no hemos hablado. El club está inmerso en los cambios que se van a dar. Estoy con la conciencia tranquila, es una cuestión de confianza por ambas partes y hay tiempo para hablar. Ahora es tiempo de estar tranquilo, desconectar y disfrutar un poco de las vacaciones. Pero es cierto que, para avanzar, lo mejor es tener las cosas hechas cuando antes para adelantar trabajo.
«De momento no he hablado con el club, hay tiempo para ello y es una cuestión de confianza»
¿Cuál es la predisposición de Curro Torres?
Estamos bien aquí, estamos felices y no sé lo que pasará. No es un tema de predisposición, el club me dio la oportunidad de venir y estoy agradecido. Veremos qué sucede, porque el club tendrá algo que decir. Insisto, hay tiempo para hablar.
¿Qué ha aprendido esta temporada?
Cada día es diferente y siempre hay que estar abierto a aprender y mejorar de las situaciones que se viven. Cada día es una nueva oportunidad para cambiar cosas en los entrenamientos o en los partidos. La experiencia, en ese sentido, te va haciendo mejor. Fue algo de lo que se me acusó, de falta de experiencia pese a que llevo ya ocho años en el fútbol sénior como entrenador.
¿Y qué sensación se lleva de León y del culturalismo?
La gente siempre me ha mostrado mucho respeto y siempre he tratado de corresponderlo con trabajo en el día a día y hacer las cosas lo mejor que he podido. León tiene cosas maravillosas, con un estilo de vida muy bueno, sus tapas, el poder salir a tomar algo... He estado muy bien, muy feliz.
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