Percan regala un bono de ilusión por el playoff al culturalismo

La Cultural y Deportiva Leonesa ganó 4-1 al Sanse en un partido muy coral, con un doblete del canterano, acompañado de Blesa y Obolskii en esta tarea goleadora que sólo se vio empañada por un error de Salvi que dio algo de vida al Sanse. Pero la Cultural se va a la Navidad viendo el playoff de cerca, a tan sólo cuatro puntos.

Ni la final del Mundial ni ningún evento de categoría planetaria iba a quitar el foco del culturalismo del Reino de León. Y en agradecimiento por ello, la Cultural salió con una enorme actitud.

En tromba, los leoneses ganaron terreno, jugaron en campo rival y empezaron a generar acciones de peligro. La primera llegó en un rechace que peleó Tarsi y que acabó con una patada en la cabeza del mediocentro, que tuvo que ser atendido por una importante brecha.

Pero, más allá del incidente, la salida leonesa era imponente. Y rápidamente tuvo premio. Blesa puso un gran saque de esquina al primer palo donde Percan, sacando su espíritu goleador, cabeceó al palo largo para adelantar a los leoneses. El momento dulce del canterano seguía vigente.

No bajó el ritmo el conjunto culturalista. Confiado y animado por la temprana recompensa lograda, mantuviera esa idea de intensidad y autoridad, de ganar balones y duelos en campo contrario, de recuperar rápido, de combinar con soltura y siendo verticales.

La volvió a tener Alarcón para el 2-0, con un disparo que repelió Pedro López en unos minutos de alto nivel de los leoneses, siendo dueños del partido, no dando opciones al Sanse y firmando, probablemente, los mejores minutos de la temporada.

Alarcón, Blesa y Percan estaban especialmente animados, acertados, valientes para encarar y buscar un área donde era Claudio el que realizaba una tarea más oscura, 'pegándose' con los centrales y generando espacios para esta segunda línea de atacantes.

Aun así, llegó un susto para los leoneses con una rápida acción del Sanse que un ex de la Cultural, Borja Martínez, finalizó con un gran disparo en el que Salvi sacó una mano importante para evitar el empate.

Pero mantuvo la imagen la Cultural. Jugando en campo rival, con ritmo e intensidad, el gol era cuestión de tiempo. Y el segundo llegó. Percan encaró a su par, al que superó por potencia para enviar un centr para Claudio que rechazó un central. Pero el balón quedó suelto para Blesa que, ante la pasividad de la zaga madrileña, pudo enganchar una volea al palo izquierdo de Pedro López para anotar el 2-0.

La superioridad era total de una Cultural que estaba ejecutando un gran monólogo en el Reino de León. No había resquicios, fisuras, espacios para la duda de un equipo leonés que estaba completando un gran partido.

Sólo una acción rocambolesca podía podía meter a los madrileños en partido. Y llegó. Salvi trató de sacar con la mano hacia Fran Cruz pero su balón se estampó en Arturo que, ni siquiera mirando a la acción, marcó el tanto que daba esperanzas al Sanse. La grada del Reino de León, lejos de señalar al meta malagueño, le tributó una ovación pese al grosero error.

Los de Docampo trataron de volver al plan inicial, pero el Sanse se había despertado. Los de Luis Ayllón se habían metido en partido de una forma casi inesperada y pelearon por lograr el empate.

El dominio de los primeros minutos de esta Cultural se disipó, si bien es cierto que dispuso, en la cabeza de Alarcón, la mejor ocasión de este tramo final de la primera mitad. Pero el tanto del Sanse cambió una dinámica muy favorable a los leoneses que dejó el choque en un trance más equilibrado.

En la segunda mitad, la Cultural intentó llevar de nuevo ese peligro, ese control de juego, que marcó la primera media hora de juego. Con Percan, de nuevo, siendo el futbolista más atrevido y determinante - la confianza es un factor fundamental para entender esta actitud -, fue Blesa quien generó peligro con una acción por el centro que acabó en falta.

Pese a todo, la estrechez del marcador había hecho mutar al Sanse. De la actitud formidolosa del arranque de partido, habían pasado a verse con opciones con ese gol fortuito y el choque era mucho más equilibrado. Si bien es cierto que los de Docampo llegaban más y generaban más acciones de peligro que los madrileños, los de Ayllón también inquietaban, aunque de forma más aislada.

Este paso adelante madrileño, al menos en control de juego, generaba más espacios a la espalda de la defensa visitante, algo que especialmente Percan podía aprovechar. La tuvo el canterano en una carrera en la que se zafó de su par y su disparo, que llevaba buena dirección, chocó en un defensa.

Pero apareció otra vez el hombre del momento. Y es que está que le sale todo, que lo que imagina, lo ejecuta. En un saque de esquina, Fran Cruz metió el balón en el área para que la tocara Castañeda y Percan, como un goleador, tocara delante del portero para poner el 3-1.

Fue el tanto de la tranquilidad porque una Cultural que merecía ganar, especialmente por la primera media hora, había visto como el Sanse quería plantarle cara, quería robarle ese premio.

Más aún se dio esa sensación de tener la victoria en la mano con la doble amarilla a Villapalos que dejó a los visitantes con uno menos. Pese a todo lo intentó el equipo madrileño, que la tuvo con un disparo a la media vuelta de Raúl Hernández que se estrelló en el poste.

Pero, pese a todo, la Cultural estuvo más cerca del cuarto que de dejar al Sanse que entrase en partido. La tuvo Alarcón con un disparo que Sergio Nieto sacó bajo palos y también Percan, de nuevo, en un córner en el que Pedro López realizó un paradón.

Ese gol llegó, en las botas de un jugador con necesidad de reinvidicarse en forma de anotación, como es Obolskii, que sentenció un partido donde los leoneses rayaron a gran altura y mostraron una imagen más que ilusionante, quedándose a sólo cuatro puntos del playoff.