La covid-19 'golpeó' a ocho jugadores de la Cultural en un brote con foco en el viaje a Luanco

López-Contreras ha explicado cómo se detectó el caso y cómo fueron las medidas de control del mismo. El galeno señala que, curiosamente, esta situación llegó «después de la semana de mayor control a causa del partido de Copa del Rey ante el Granada». El jueves 7 de enero, la plantilla se sometió a un test de antígenos sin casos positivos que posibilitó la disputa del choque, ese mismo sábado, ante el Marino.

El temporal que azotó España en esos días hizo que el club tomara la decisión de hacer noche en Gijón para la disputa del choque, algo que «consensuaron» con los servicios médicos, sin detectarse síntomas hasta el lunes, cuando un jugador llamó aquejado de «un dolor de cabeza muy banal, una sintomatología muy leve».

Fue ahí cuando se activó todo el protocolo. Este futbolista pasó el pertinente test que arrojó un resultado positivo e hizo que toda la plantilla se sometiera a estas pruebas en dos ocasiones, arrojando un total de siete positivos. «Sólo habíamos tenido un caso en toda la temporada en la primera plantilla, ninguno en el Juvenil y dos en el Júpiter, uno con contacto habitual con el primer equipo», señala López-Contreras.

En este sentido, el médico de la Cultural destaca que ese viaje a Luanco pudo afectar a hacer más grande el brote, pero insiste en que es algo que no se puede saber a ciencia cierta y ensalza los protocolos y medidas adoptadas por el club aunque afirma que los reforzarán y que se evitarán todas las concentraciones en hoteles y similares que sean posibles. «Sin ese viaje, es posible que no se hubieran dado tantos positivos», añade.

El galeno ha destacado lo «escrupulosos» que han sido con todas las medidas de prevención y ha admitido que las dimensiones de algunos vestuarios, como el de Miramar - estadio del Marino de Luanco - dificultan las medidas de distancia de seguridad.

López-Contreras también admite que es probable que algún jugador «estuviera incubando y llevara» la infección a ese partido y que el primer positivo detectado «no tiene por qué ser el primer contagiado del equipo». Curiosamente, señala, el compañero de habitación del primer caso detectado dio negativo en todos los test.

En total, asegura el galeno, se han dado diez positivos incluido el jugador del Júpiter con actividad habitual en el primer equipo de los que ocho han sido futbolistas y dos personal del club. De todos ellos, no ha habido ninguno con «problemas respiratorios», lo que va a provocar que «la recuperación sea más rápida». En el resto de casos sintomáticos, han tenido síntomas muy leves como «dolores de cabeza de apenas 24 horas o pérdida temporal del olfato y el gusto». Actualmente, sólo permanece un jugador aislado, que saldrá de la cuarentena el jueves y que no llegará al partido ante el Lealtad.

Después de pasar distintos reconocimientos médicos con espirometrías y electrocardiogramas, los contagiados han mostrado índicaes de «capacidad pulmonar muy buenos y sorprendentes» y se evaluará su fatiga y cansancio de forma diaria para «si hubiera alguna anomalía, actuar». Pese a ello, el doctor culturalista afirma que los casos asintomáticos podrán jugar el domingo sin problema y los sintomáticos dependerán de su evolución.

Por todo ello, López-Contreras señala no se puede hablar de inmunidad de rebaño, pero sí de una parte importante de la plantilla inmunizada lo que ocasiona que la posibilidad de un nuevo brote de este calibre es «remota». Para comprobar esta inmunización, los jugadores que han superado la infección serán sometidos en 15 días a un test serológico para comprobar que «han desarrollado anticuerpos».

El médico de la Cultural también ha agradecido la «total disposición» del club a realizar el número de pruebas que fueran necesarias - destacando que en los últimos días se han realizado seis cribados a la plantilla - y que en los últimos días han pasado pruebas todos los empleados del club, incluidos los de oficinas y dirección.

Por todo ello, señala que el partido del domingo ante el Lealtad «se va a celebrar, al menos por nuestra parte» y, preguntado por una posible suspensión de la competición, no la valora a día de hoy, pero sí cree que se puede plantear si la incidencia de la covid-19 sigue desbocada.

Por otro lado, López-Contreras ha analizado las lesiones actualmente existentes en la Cultural y ha señalado que Kawaya y Mario Sánchez ya entrenan con normalidad y podrían jugar ante el Lealtad. En el caso de Samu Diarrá, su recuperación evoluciona positivamente y podría incorporarse a la dinámica de grupo esta misma semana.

Ha reconocido que esta temporada está habiendo «más lesiones musculares de lo habitual, incluso más que en las tres últimas campañas juntas». En este sentido, ha considerado que, siguiendo la misma «filosofía de preparación física que otras temporadas», la explicación puede estar en el mayor estrés al que están sometidos los jugadores por la «incertidumbre de saber que la competición se puede suspender en cualquier momento y que la temporada sea más corta».