Los cachorros se hacen mayores en el Reino de León

El tanto culturista supuso el despertar de un Ciudad Rodrigo, que había salido dormido en la segunda jugada del encuentro. Un despiste defensivo que fue compensado con el tanto visitante, obra de Alberto García, rondando el cuarto de hora de la primera mitad.

El regreso de la igualada en el marcador duro escasos quince minutos. El goleador de la tarde, David Sanz, volvía adelantar al cuadro local al filo de la media hora de juego.

Los leoneses conseguían irse al tiempo de refresco, comandando en el luminoso y con buenas sensaciones. Unos primeros 45 minutos de buen fútbol culturista, que se veía reflejado en el césped.

El cuarto de hora permitió al cuadro charro reorganizarse y pronto se vió la mejoría. Los naranjas devolvían la igualada al marcador por segunda vez con un tanto de Sergio Honorato, ante un Júpiter que era efectivo arriba, pero concedía demasiado atrás.

Tras este segundo empate, los visitantes se animaron a subir arriba y dos tantos de Alberto Martín en diez minutos, permitían ampliar la diferencia a dos para los salmantinos. Un resultado que no hacía justicia al juego reflejado por los muchachos de Isra Martínez, mejor colocados en el rectángulo de juego.

La sorpresa llegaría en los compases finales del partido, ya que un tanto de Diego Pertejo en primer lugar y posteriormente, otro de Marc Padilla, devolvían una nueva igualada al marcador, que había tenido por dueño a los dos equipos durante noventa y seis minutos de juego.