Aarón Piñán: «Quiero renovar pero, en caso de salir, debe de haber beneficio mutuo para mí y para el club»

El futbolista leonés ha pasado por deporte(n)vivo para analizar su situación personal y la de una Cultural en la que se ven síntomas de mejoría y optimismo con la llegada de Curro Torres a su banquillo.

Aarón, cuyo nombre ha estado sonando para varios equipos de Segunda en el mercado invernal, ha negado en primer lugar ningún tipo de oferta en enero por él. «Ha habido mucha habladuría». El futbolista leonés insiste en su idea de estar en la Cultural hasta junio y luego «pasará lo que tenga que pasar».

Ante todo, ha reconocido estar «muy a gusto» en la Cultural, donde se siente muy querido por la afición de la Cultural, algo que «vale mucho». «Me han escrito más por las redes sociales tras la expulsión ante Unionistas que por marcarle dos goles al Deportivo. Estoy en mi ciudad, con mis padres, mi novia, mis amigos y siempre el cariño en la calle, de los niños... Nunca podré agradecer todo eso a la afición», ha recalcado.

Sí asegura, sin embargo, que hay conversaciones abiertas entre su representante y el club para renovar por más años - su contrato ya está prolongado de forma automática hasta 2023 - pero afirma que «es algo complicado, que no se hace de un día para otro porque hay muchas cláusulas y párrafos con letra pequeña a vigilar para no salir perjudicado».

Y es que, prosigue Aarón, piensa en su «día de mañana» pero sin descartar que sea en la Cultural porque «estoy muy feliz aquí y, si tengo que estar dos o tres años más, o los que sea, así será». «Quiero renovar en la Cultural, cuanto más años mejor, pero son cosas entre mi representante y el club. En caso de cualquier movimiento, tiene que haber un beneficio mutuo mío y del club», ha reafirmado Aarón que aclara: «No me quiero comer la cabeza ahora con eso».

En lo deportivo, el leonés vivió con «rabia» la derrota ante Unionistas en un partido donde el equipo demostró que «sabe jugar bien, con intensidad y pelear». «Da rabia perder por un despiste a balón parado, algo que trabajamos mucho, y nos faltó suerte para marcar. Te vas fastidiado por la derrota, pero este equipo me representa, da gusto verlos», ha explicado.

La Cultural se quedó con diez en el minuto 23 por la expulsión del propio Aarón, que sintió rabia e impotencia por esa acción. «Es mala suerte, no puedo controlar lo que sucedió. Es una acción, un control, que me gusta mucho y llego antes al balón que el rival, pero ya tengo el pie en su cabeza. La decisión de la expulsión es criterio del árbitro, pero es una acción involuntaria», reconoce Aarón, que asegura que sólo le habían expulsado una vez en cadetes. «Me quedé en el túnel de vestuarios y quería hasta llorar. Vivo mucho el fútbol y estuve muy dolido», ha apuntado.

Esta ha sido el cuarto partido consecutivo en el que la Cultural se queda con un jugador menos, aspecto que Piñán cree que es una «casualidad» que «nos está perjudicando».

«Hay rojas que son y otras que no. La de Jony [Álamo], por ejemplo, en la que se fija en el banquillo... da la sensación de que quiere expulsarle estando más atento al banquillo que al campo. No quiero pensar que se nos está perjudicando, porque los árbitros son profesionales y no creo que quieran ser protagonistas. Es muy difícil arbitrar porque tienes 22 jugadores detrás de ti metiéndote caña y un estadio pitándote mientras tomas decisiones rápidas, así que creo que es eso, casualidad», ha indicado.

En lo puramente deportivo, Aarón ve a Curro Torres como un entrenador que «sabe transmitir mucho» al equipo y destaca que sabe «con qué tocarte, con qué vacilarte, con qué meterte caña». «Tiene las ideas muy claras y parece que nos conoce desde hace mucho», afirma el leonés que, más allá de los conceptos futbolísticos, ve un cambio en la actitud: «Todos han visto una nueva oportunidad con él y cada entrenamiento da gusto, algo que se refleja también en los partidos».

Uno de los principales cambios se ha visto en defensa, con una línea de tres centrales que «nos da un jugador más atrás». «Estamos en bloque, vamos todos juntos a la presión, aunque atentos a que no nos cojan la espalda. Entrenamos varios aspectos de presión y de salida de balón, es complicado que todo salga bien a la primera», explica el '7' culturalista que ve al equipo «más comprometido» a nivel defensivo.

En este sentido, con el plus de los refuerzos que son «jugadores de mucha calidad que van a ir entrando más con el paso del tiempo», Aarón insiste en que todos tienen que dar un paso adelante y saber «qué puede dar cada uno y hacerlo». «Yo, por ejemplo, no estoy al nivel de principio de temporada. Se me ha juntado el covid-19, una lesión, pero hay que ser constante. Ahora son Solís o Gaztañaga quienes están a un mejor nivel, otras semanas eran otros. Hay que buscar un punto en el que seamos los once que están en el campo», ha explicado.

En lo personal, ha explicado que Curro Torres le pide no arriesgar en campo propio, pero le da «libertad» en campo rival, reclamándole que juegue algo más por dentro. «Sabe que soy un jugador vertical, que me giro y busco portería. Esa libertad nos gusta a los jugadores y transmite muy bien sus ideas», ha añadido. El entrenador catalán también le catalogó en leonoticias como 'el león del escudo de la Cultural', algo con lo que «me mete caña» y le ha causado alguna broma en el vestuario: «Es algo que se agradece».

Y es que Aarón Piñán porta el brazalete, algo que es «un privilegio y me cambia hasta la actitud». «Exijo mucho a compañeros, afición... puede que me vuelva un poco loco. También intento ayudar a los compañeros fuera y escuchar a los más veteranos, que saben mucho del fútbol y de la vida, aunque a veces también me tienen que escuchar a mi. Todo lo que haga será siempre para mejorar», ha expresado.

En este papel de capitán, también reclama más cariño para la plantilla, poniendo como ejemplo, tras ser preguntado por este caso en concreto, de Riki Mangana, con el que tiene una gran relación fraguada la pasada temporada en el Coruxo. «Le pedí que no leyera nada, porque le iba a perjudicar».

«Si en vez de pitar, le animamos, todo será diferente. Riki es un gran tipo, se preocupa de equipo como el que más y me duele que se le trate así porque tiene un nivel muy alto que no ha podido mostrar. Pitando a un jugador sólo se le está perjudicando y, si se le anima, va a dar más de sí. Me fastidia esta situación y, desde el campo, pido a la gente que no lo haga», ha expresado.

Aarón recuerda también el caso de Héctor Hernández: «Le dije que cuando saliera de la Cultural sería un jugador nuevo y lo está demostrando - lleva 8 goles en el Rayo Majadahonda - ».

Es por ello que el leonés reconoce que hay jugadores que «lo llegan a pasar mal jugando en el Reino, y es algo que nos tenemos que hacer ver como aficionados». «Riki, por ejemplo, ha demostrado un buen nivel fuera de casa, pero en el Reino, como sabe que se puede dar esa situación, no lo alcanza. Si entre todos le ayudamos, nos va a sorprender», ha insistido Aarón, que reclama que no haya «más presión para nosotros en casa que un campo rival». «Envidio a aficiones que cantan los 90 minutos, pase lo que pase. Si aquí lo hiciésemos, saldríamos ganando 2-0 todos los partidos», ha recalcado.

El '7' culturalista también ha tenido palabras de asombro y loa para la cantera culturalista y afirma que «flipa» con el nivel de Rodri, Percan, Marcos o Javi Fernández. «Un chico de León se pone la camiseta de la Cultural y se transforma. Si ponemos a un cadete, sólo por las ganas y el correr como el que más suple otras cosas. Hay mucho nivel y es privilegio para todos. Ojalá en el futuro haya siete u ocho leoneses en el once», ha expresado.

Aarón también reconoce su papel de «guía» con los canteranos aunque «algunas veces les digo algo para tratar de corregirles y no les sienta bien, pero es para beneficio de todos». «Me gusta que me escuchen, pero también les escucho. A Rodri, por ejemplo, no hace falta decirle nada, es muy tranquilo. Percan es más como yo, tiene más sangre. Somos de la casa y nos ayudamos», ha reconocido.

Con la sensación de que «el partido en Extremadura se va a jugar, hasta que no haya una comunicación oficial que diga lo contrario» y la mente «única y exclusivamente» puesta en ese partido, Aarón pide a la afición creer: «Mientras haya posibilidades, pelearemos por el playoff y lo vamos a dar todo, todo lo que esté en nuestra mano».

Y, en caso de que no hubiera partido, Piñán es claro: «La exigencia es tan alta que no va a afectar. Sólo pensamos en el siguiente partido, sea el que sea y mi mente está en ayudar, aunque no pueda jugar. Quiero ser el mejor en cada entrenamiento».