dani gonzález
Sábado, 6 de mayo 2017, 13:14
«Es el primer partido de playoff». Así han calificado desde la Cultural y Deportiva Leonesa el partido que este domingo (12:00 horas) disputarán en el estadio José Zorrilla ante el Real Valladolid B. El objetivo no es otro que ganar, seguir líderes ... y estar a solo un paso de certificar su presencia en el playoff de campeones.
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La segunda oportunidad que les ha dado el fútbol, tal y como la ha descrito Rubén de la Barrera, no puede desaprovecharse. Aprender de errores pasados, no tener miedo a perder el primer puesto y saltar al césped del coliseo vallisoletano teniendo en cuenta lo mucho que hay en juego son las máximas que la Cultural tratará de plasmar sobre el verde.
Desplazamiento leonés masivo
Y todo ello con un aliento desde la grada calificado ya de histórico. En torno a un millar y medio de culturalistas harán acto de presencia en el José Zorrilla después de 'obligar' al Real Valladolid a abrir su estadio para este partido tras superar con creces la demanda a orillas del Bernesga el aforo de los Anexos.
Y es que esta plantilla ha sembrado una semilla muy valiosa, la ilusión. Son los adalides de este sentimiento, tan implantado en la afición leonesa que sueña con cotas mayores. El playoff ha pasado de ser un reto, un sueño, a ser una realidad que se queda incluso pequeña para las expectativas creadas.
Una segunda oportunidad a aprovechar
Pero este sentimiento se ha renovado. La 'carambola' sucedida hace siete días, con la derrota del Racing y el pinchazo del Celta B que ocasionó que el triunfo culturalista ante el CD Lealtad sirviera para retomar el liderato, ha reavivado, si es que alguna vez se había apagado, la llama del sueño.
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Por ello es tan importante en León este partido. No solo el histórico desplazamiento y la apertura de Zorrilla colaboran para ello, también que esté en juego mantener el liderato en el compromiso más complicado para hacerlo. Cerrar la temporada en casa ante Osasuna B, que podría no jugarse nada en la última fecha, hace más asequible ese duelo que el enfrentamiento ante un filial blanquivioleta que, si bien es cierto que ya no tiene nada en juego, estará extramotivado por pisar el césped del Zorrilla.
Será un partido entre dos estilos similares, dos filosofías que apuestan por el balón como medio y fin en sí mismo. La batalla por la posesión determinará quién manda en el choque, algo vital, ya que son dos conjuntos que viven por y para el esférico. La velocidad y verticalidad por bandas y la presión en campo rival serán otras dos de las claves para este encuentro.
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Los apercibidos en mente
Algo que ronda la cabeza de Rubén de la Barrera es el tema de los apercibidos. Toni, Julen Colinas y Mario Ortiz, con cuatro amonestaciones, están a una de ser sancionados, aspecto a cuidar. De hecho, este factor deja fuera de este compromiso a Gianni y Forniés, lo que, sumado a la lesión de Cano para una semana, deja la defensa casi en cuadro con Bastos, Iván González, Regalón y Viti disponibles.
Samu Delgado y José León, que siguen recuperándose de sus lesiones, completan el apartado de bajas en una convocatoria en la que el coruñés deberá volver a echar un ojo a los jugadores del filial que acostumbran a entrenar con el primer equipo como Álex, Touré o Tarek.
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Son los adalides de la ilusión y quieren seguir portando esta bandera. Para ello, ganar se convierte en el pasaporte hacia la confianza, hacia el sueño, hacia el seguir mandando una jornada más. Todo ello está al alcance en el José Zorrilla.
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