Mireya González cree que sería «una locura» reanudar la liga en Rumanía

«Todos los deportistas queremos jugar, eso es indiscutible, pero con las debidas garantías sanitarias y también física, por eso no parece razonable la propuesta de la Federación rumana de disputar las jornadas ligueras que restan -seis- y los tres partidos de Copa en 22 días», señala la lateral leonesa que sigue confinada en su domicilio familiar.

Por tanto, si finalmente no prospera la solicitud, entre otros, de su equipo para la suspensión de la competición, podría verse obligada a empezar a disputar los partidos tras el necesario periodo de dos semanas previas de aislamiento en Rumanía, al proceder de otro país.

González ha intentado mantener durante estas semanas en León la condición física «aunque siempre he sido muy mala para saber con exactitud lo que he perdido durante los parones en la competición».

La temporada, primera en el equipo rumano, estaba siendo una de las más completas en la trayectoria de la lateral zurda leonesa, convirtiéndose en pieza clave en su equipo, con el que encabeza la clasificación liguera y había alcanzado los cuartos de final de la Liga de Campeones, siendo elegida en esta competición como una de las revelaciones, a pesar de que ya conquistó el título con el Gyor.

Sin embargo, el papel que tuvo en el conjunto húngaro, donde también militan las internacionales Marta López y Alicia Fernández, fue muy diferente al actual, donde era una de las máximas goleadoras del Valcea, con el que amplió su contrato para la próxima temporada.

Al margen de su participación con el club, Mireya González ha adquirido un protagonismo también en la selección española que dirige Carlos Viver y donde conquistó en Japón hace unos meses el subcampeonato del mundo, aunque posteriormente no pudiera redondear la tarea logrando la plaza olímpica para Tokio 2020, al aplazarse el preolímpico de Lliria, de momento, al verano.