La permanencia pasa por el Palacio

El objetivo de la permanencia, a falta de cinco jornadas, está muy cerca de ser una realidad en la Cultural. Los leoneses, a pesar de su última derrota en Córdoba, siguen sin salir de los puestos de playoff y, con un récord de once victorias, se encuentran cada vez más próximos a certificar la salvación en la Segunda FEB, lo que supondría un gran paso en el proyecto culturalista.

Para ello, el Palacio será encargado de dictar sentencia. Solo cinco jornadas por delante hasta el final de temporada y tres de ellas se disputarán en León, siendo la primera este domingo (18:30 horas) ante Zornotza, colista y peor visitante de la categoría.

La pasada derrota ante Coto Córdoba apeó al cuadro culturalista hasta la sexta posición de la tabla, con una victoria menos que Iraurgi, Clínica Ponferrada, La Salud Archena y Melilla, todos ellos por encima de los de Luis Castillo. Sin duda, esto habla de la igualdad de una categoría en la que, quizás, Zornotza es, junto a Algeciras, el rival más descolgado. Con tan solo siete victorias, los vizcaínos se mantienen últimos.

Aunque la clasificación esboza una diferencia notable entre ambos conjuntos, la Cultural debe recordar lo sucedido en la primera vuelta, cuando los leoneses cayeron en el feudo zornotzarra por 87-83 y constataron allí la única racha de tres derrotas que han cosechado hasta el momento.

Por si fuera poco, Zornotza llega al Palacio tras cambiar de entrenador este mes de marzo. Con Íñigo Núñez ya a los mandos, el cuadro de Vizcaya consiguió la pasa jornada una contundente victoria ante Caja 87 (87-62) en el que, sin duda, fue el mejor partido de la temporada para los locales, sobre todo en una segunda mitad de superioridad apabullante.

Eso sí, los números hablan por sí solos y la realidad es que los zornotzarras, lejos de casa, aún no han conseguido ganar en lo que va de temporada, algo que muestra una debilidad que debe aprovechar la Cultural en una nueva muestra de su poderío como local.

Sin más ausencias que la ya conocida -aunque no por ello menos importante- de Pau Isern, que no volverá a jugar en lo que queda de liga regular, el conjunto de Luis Castillo deberá mejorar respecto a lo visto en Córdoba y dar el paso adelante definitivo para certificar la salvación.

Y la mejora pasa, principalmente, por mejorar el desempeño defensivo y hacerse más poderosos en el rebote, además de incrementar la efectividad en el tiro libre respecto al último encuentro. En caso de conseguirlo, existirá licencia para soñar.