El Real Madrid oficializa el fichaje de Poirier

La salida del argentino a los Oklahoma City Thunder, donde percibirá cuatro millones de dólares por lo que resta de temporada, obligó a los blancos a mover ficha y adelantar una operación que tenían ya prevista, pero de cara a la próxima campaña.

Aunque no comparten posición en la cancha, la llegada de Poirier es un golpe encima de la mesa por parte de un equipo que lidera la Liga Endesa y afrontará un duro cruce de cuartos de final en la Euroliga ante el Anadolu Efes. Una competición esta última en la que no podrá jugar Poirier, al haberse cerrado ya el plazo para inscribir jugadores.

Pívot de 2,13 m y 27 años, Poirier es uno de los pívots más poderosos del continente y cuenta con experiencia en la ACB, merced a su paso por el Baskonia, club en el que militó durante dos temporadas (2017-18 y 2018-19). Con el equipo vitoriano disputó 79 partidos de liga, con una media de 8,9 puntos y 5,8 rebotes. Fue elegido para integrar el segundo mejor quinteto de la ACB en la 2018-19, una temporada en la que deslumbró en la Euroliga con 11,9 puntos, 8,3 rebotes y 17,7 de valoración media. Fue el máximo reboteador de la competición europea e integrante del segundo mejor quinteto.

De allí dio el salto a la NBA, donde no ha tenido la fortuna que buscaba. Disputó 22 partidos con los Boston Celtics en el curso 2019-20, promediando 1,9 puntos, 2 rebotes y 0,4 tapones por duelo. A ellos sumó otros diez encuentros con los Philadelphia 76ers esta temporada, siendo un activo residual en la rotación de Glen 'Doc' Rivers.

Pese a ello, su gran cartel en el viejo continente le convertía en un preciado objeto de deseo por parte de varios equipos. Estaba en la órbita del Anadolu Efes y también figuraba en los planes del Barcelona, pero finalmente ha sido el Real Madrid el que le ha echado el lazo a un cinco de gran físico, poderío bajo los tableros y notable defensor.

Su llegada reforzará el juego interior del cuadro de Pablo Laso y permitirá dar más aire al caboverdiano Walter Tavares, al que comienza a pasarle factura la elevada carga de minutos que acumula en una temporada sin tregua.