España compite ante Estados Unidos pero claudica en el tramo final

Jalen Brunson comenzó imparable. El base de los New York Knicks, uno de los mejores contra Eslovenia, anotó siete puntos en un visto y no visto y lideró la primera ventaja significativa norteamericana con el 5-12. Reaccionó bien España de la mano de los Hernangómez, dos NBA durante muchos años que esta temporada regresan al baloncesto europeo y tenían ganas de demostrar su condición de estrellas frente a Estados Unidos. Entre los dos hermanos metieron una marcha más al juego español e igualaron el trepidante ritmo impuesto por los hombres del laureado Steve Kerr desde el primer segundo hasta el 18-17.

Scariolo movió el banquillo y Santi Aldama, que sigue siendo NBA y cada vez más importante, asumió el testigo. El de los Memphis Grizzlies, un interior moderno, de esos que manejan el balón y se desplazan como un jugador pequeño, sigue maravillando a una afición española que lo conoce poco debido a su formación en el baloncesto estadounidense.

Solo el enorme acierto norteamericano desde el triple y la voraz anotación de Brunson, que se fue a los 16 puntos con la mitad del partido por delante, le permitía mantener una ligera ventaja a lo largo del segundo parcial. Se aproximaba la pausa y el equipo de Steve Kerr no veía claro el panorama tras el paseo del día anterior contra una Eslovenia sin Doncic. Fue ahí donde el Team USA tiró de piernas, apretó en defensa y corrió a la contra para terminar por encima del aro. En un instante se puso diez arriba (45-55) hasta enfilar el camino a los vestuarios. Así se las gasta la potencia hegemónica del baloncesto.

El parcial adverso no intimidó a España, que devolvió la moneda con un 9-0 de salida tras el descanso y Álex Abrines desatado, mostrando que es una pieza fundamental para esta selección por su capacidad de anotación en periodos cortos. Brunson, inmaculado en el tiro, respondió para sostener la de nuevo precaria ventaja estadounidense. «A por ellos», gritaban las más de 10.000 personas congregadas en el Martín Carpena mientras los hombres de Scariolo le daban la vuelta al duelo con dos tiros libres de Aldama (65-64).

Rudy acertó a la segunda intentona desde la distancia y el +4 enloqueció al público malagueño, soñando con la quinta victoria ante Estados Unidos 21 años después. Reaccionaron los americanos, pero su estirón solo dio para el ajustadísimo 72-73 al término del tercer cuarto. Diez minutos por delante e igualdad total, excelente test ante el mejor rival posible.

El gran trabajo en el rebote y un gran acierto de tres daban sus frutos a España, metida de lleno en el partido, pero Estados Unidos reaccionó a tiempo, agitada por la realidad del resultado. Mikal Bridges asumió la responsabilidad y el potente combinado de Kerr estiró su ventaja hasta el 79-86. Aguantaba La Familia como podía pero el Team USA metió la quinta y finiquitó la disputa con Anthony Edwards en modo estelar para el +11 americano a falta de dos minutos. Ya no hubo partido, pero la selección extrae sensaciones positivas de un partido vibrante frente a la gran potencia mundial.