La Cultural pone el broche de oro a un año para el recuerdo

El partido perfecto para cerrar el año. La Cultural podrá irse a disfrutar de las fiestas navideñas con el placer y la tranquilidad de haber dejado los deberes bien hechos. Todo volvió a funcionar en el equipo de Luis Castillo, que venció a La Salud Archena de forma contundente (102-79) para clausurar el 2024 de la mejor forma posible. Un triunfo que aúpa al cuadro culturalista a la parte alta de la tabla, alejándolos de la peligrosa zona de descenso y dejando grandes sensaciones de cara a un mes de enero muy duro.

El duelo entre los dos recién ascendidos se antojaba vibrante. La Cultural quería tomarse la revancha tras haber caído el pasado mes de mayo contra los murcianos en el primer encuentro de la fase de ascenso a Segunda FEB. Por suerte, esa derrota no truncó el salto de división de los leoneses y ahora ambos volvían a verse las caras en una categoría superior.

La ilusión florecía en un Palacio animado, como viene acostumbrando en este inicio de temporada en el que ha vuelto a evidenciarse que en León gusta mucho el baloncesto. Los jóvenes de entre 10 y 17 años, además, solo debían llevar un peluche para poder acceder al feudo culturalista sin necesidad de pagar entrada, algo que mejoró aún más la imagen de las gradas.

En lo que se refiere al interior del rectángulo de juego, el quinteto inicial de los leoneses no difirió con respecto al de la pasada jornada ante Clavijo. Lo que funciona, suele decirse que es mejor no tocarlo. La Cultural se unió a la fiesta que se estaba viviendo en las tribunas y firmó un arranque de partido pletórico. El primer parcial 11-2 con protagonismo desde el triple de Okafor y Staine obligó al técnico visitante a parar el choque utilizando el primer tiempo muerto de la tarde.

La Salud Archena intentaba seguir el ritmo culturalista, pero su efectividad distaba mucho de la versión tan acertada que estaban mostrando los de Luis Castillo durante los primeros compases. Lo único reprochable al cuadro leonés era la dificultad a la hora de recoger rebotes defensivos, pero ni eso supuso un problema para la Cultural.

Fares Ochi y Obi Okafor se encargaron de personificar el ritmo anotador de los locales a través de su gran rendimiento inicial, con diez y ocho puntos respectivamente. Fàbrega y Bultó entraron desde el banquillo y, lejos de desentonar en medio del vendaval ofensivo culturalista, se sumaron a la causa para acabar de cerrar un primer cuarto cercano a la perfección (32-16).

Los culturalistas no lograron mantener sus excelsos porcentajes de efectividad tras la reanudación, pero Archena seguía mostrando una versión muy errática y eso mantenía la tranquilidad, al menos de momento, en el equipo leonés. Pau Isern se encargó de solapar el débil intento de mejora de los murcianos con dos canastas consecutivas que volvieron a suponer el tiempo muerto solicitado por Pedro Hermógenes.

El base catalán se activaba cada vez más con el paso de los minutos y esto suponía un nuevo problema para La Salud Archena. El otro gran protagonista del segundo cuarto fue, sin duda alguna, Isaac Vázquez. El base orensano llegó a León para ser uno de los grandes bastiones del equipo de Luis Castillo y, una vez recuperado de su lesión, no está desperdiciando ningún minuto de juego. Con un triple, se encargó de firmar la renta máxima de 21 puntos para decantar cada vez más el duelo antes del descanso (48-27).

El tiempo de descanso también fue especial en las gradas del Palacio, pues se aprovechó para realizar una lluvia de peluches que mostraba la solidaridad de la afición culturalista con los más necesitados. El escenario hasta el momento era idóneo para una Cultural festiva que quería seguir por todo lo alto en la segunda mitad.

Nada cambió con respecto a lo visto anteriormente. La Salud Archena no tenía su tarde y, por más que lo intentaba, seguía manteniendo unos porcentajes de acierto muy bajos. Staine abrió el marcador del tercer cuarto con un triple que replicó de manera instantánea Montero. Fue el primer tiro de tres anotado para los murcianos en el duelo después de cinco intentos previos fallados.

La Cultural, en la otra cara de la moneda, también fue capaz de mantener el ritmo anotador para seguir llenando de dudas a un conjunto murciano que seguía sin encontrar el método con el que meterse en el partido (66-38). Prácticamente cada balón que pasaba por manos leonesas acababa dentro de la canasta. Todos los jugadores, tanto los titulares como los que esperaban en el banquillo, estaban enchufados, con especial mención en este tramo para Frank Staine y Fàbrega.

Sin necesidad de alcanzar los últimos diez minutos de juego, los culturalistas cerraron un parcial 20-2 para sentenciar definitivamente el choque (80-40). El último cuarto sirvió para que el conjunto leonés, de forma merecida, disfrutara de un final placentero y siguiera exhibiendo su juego. Obi Okafor machacó la canasta visitante dos veces seguidas para volver a levantar al Palacio y mantener la renta superior a cuarenta puntos (91-48). También contó con una nueva oportunidad Yago Iglesias, cada vez más asentado en la dinámica de Luis Castillo.

La Cultural, que había logrado su mayor número de puntos en el duelo más reciente ante Clavijo, volvió a superarse y llegó al final del choque por encima de los cien puntos (102-79). El cierre del año fue inmejorable en un feudo leonés que disfrutó durante todo el partido de la mejor versión del equipo de Luis Castillo.