Una Cultural de 10

Desde el inicio, el partido estuvo marcado por el alto ritmo que ambos equipos imprimieron al juego. La Cultural, dominante y autoritaria, basó sus primeras ventajas en una buena defensa y un ataque dinámica: era el plan de cada partido.

Estudiantes Lugo, que llegó a León con la vitola de ser uno de los mejores equipos que iba a pasar por San Esteban, demostró estas afirmaciones con poso y saber estar, aguantando el tipo ante una Cultural con muchos recursos.

El juego interior funcionaba con Sergio Martínez, pero también el exterior con Copes o Fábrega. Al final del primer cuarto, la Cultural ya iba ganando (24-21).

Pero el golpe de efecto llegó en el segundo cuarto. Un parcial 9-0 de salida, con casi cinco minutos sin recibir puntos, disparó a la Cultural por encima de los 12 puntos de ventaja.

Con Domínguez en racha, sacando a relucir ese fondo de armario del que goza la Cultural, el equipo leonés puso los primeros cimientos para la victoria en este cuarto, en el que la diferencia entre ambos equipos no bajó de los diez puntos.

Al descanso, los de Luis Castillo se iban con un marcador favorable (46-34) y sensaciones que invitaban al optimismo.

Tras el paso por vestuarios, la Cultural no bajó el ritmo y mantuvo su intención de hacer hueco con varios de sus hombres, pero especialmente Fede Copes, inspirados en la anotación.

Llegó el equipo leonés a los 20 puntos de renta, instante el que Estudiantes Lugo reaccionó por orgullo y la Cultural falló, quizá por haber bajo una marcha la intensidad, devolviendo los baremos en el marcador al entorno de los 12 puntos.

En el último cuarto, la Cultural no dio ni una mínima opción al equipo lucense de soñar o imaginarse una remontada. Los de Luis Castillo, muy serios, jugaron un cuarto muy completo para cerrar la victoria en el definitivo 90-71.