El Valencia rompe en la prórroga su maldición de las últimas Copas

No pudo ser más emocionante el desenlace de un duelo que empezó vivo, con chispa pero escaso acierto. Gran Canaria amenazó con despegar pronto, pero el Valencia, que finalmente pudo contar con Brandon Davies, su faro bajo el tablero, llevó el segundo partido de cuartos al escenario previsto, el de la máxima igualdad. Justin Anderson, cuyo fichaje invernal ha salido bien, inversamente proporcional al de Pangos, tiró del carro 'taronja', pero le respondió Landesberg, ejecutor en la primera ventaja canaria importante (25-19). Aguantaron el tirón los hombres de Mumbrú y condujeron el duelo hasta el descanso en un pañuelo.

La pausa no cambió la pauta del partido. Tira y afloja entre Gran Canaria, más coral, y Valencia, impulsado por los puntos de Davies y Anderson. Menos dependiente de esas individualidades, el equipo amarillo encaró mejor el tramo final del tercer cuarto y sostuvo su ventaja hasta el vendaval de Stefan Jovic, el hombre que metió de nuevo al Valencia en la pelea.

A falta de menos de cuatro minutos, con el duelo igualado, el Valencia entró en racha y estiró su renta para prácticamente sentenciar el partido. AJ Slaughter prolongó el aliento de vida canario hasta el último segundo y Brussino, hasta ese momento poco protagonista a pesar de ser el jugador amarillo más esperado, llevó el duelo a la prórroga con un triple sobre la bocina.

Había hecho lo más difícil el Gran Canaria, parecía que iba hacia arriba después del subidón, y sin embargo naufragó estrepitosamente en el tiempo extra. Un parcial de 0-10 sepultó sus opciones y acabó con la mala racha en la Copa del Valencia.