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Una gran imagen que no ha sido correspondida con un billete para la final. Saúl Ordóñez ha puesto punto y final a su participación en los Campeonatos del Mundo de Atletismo de Budapest con una gran actuación en la segunda semifinal de los 800 metros.
El atleta de Salentinos, en una serie con gran nivel, se mantuvo siempre entre los mejores en un grupo que siempre fue compacto pese al gran ritmo impuesto por el canadiense Marco Arop.
Ordóñez, siempre bien protegido y colocado en la cuerda, fue ganando posiciones, siguiendo la estela del francés Gabriel Tual y trató de explotar su gran 'rush' final para ganarse un puesto en la lucha por las medallas.
Luchó hasta el final, con el canadiense Arop y el argelino Sedjati con unos metros de ventaja, en la recta de meta. Ordóñez, con un gran tiempo de 1:44.74, fue tercero, muy cerca de su marca de la temporada, pero insuficiente para estar en la final.
Una primera y última serie tremendamente veloces, dejaron en 1:44.23 la repesca, que marcaba Ben Pattison (Gran Bretaña) y donde el otro español, Mohamed Attaoui (1:44.35) se quedó a un puesto de optar a dicho pase a la final.
El atleta berciano, en el micrófono de TVE, reconoció estar «feliz» pese a no pasar a la final: «Estoy entre los 15 mejores del mundo y estoy muy contento. He luchado y lo he demostrado, ha sido muy positivo».
Ordóñez ha analizado la carrera, en la que siempre ha estado pegado a los mejores y se ha quedado con «cierto resquemor»: «He hecho una buena carrera, me he ido colocando y sólo el último 100 metros se me ha hecho un poco largo».
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