Roberto Aláiz vuelve a los 2.000 metros obstáculos en Alemania tras «años de sinsabores»

El atleta de Hoka, que comenzó su calvario de lesiones a finales de 2015 cuando se vio obligado a retirarse en las semifinales de los 3.000m obstáculos del Campeonato del Mundo de Pekín, reapareció el año pasado con sus primeras carreras en pista, corriendo los 3.000 metros lisos en 7:56.30 y clasificándose octavo en los 5.000 metros del Nacional.

Dos nuevas lesiones en sus gemelos encadenadas este pasado invierno demoraron su puesta a punto para la presente temporada de verano, que pese a todo estrenó en el Meeting 'Toni Bonet' de Ibiza el pasado día 8 de mayo con unos prometedores 7:59.76 en 3.000 metros, tras apenas ocho semanas de entrenamiento, varias de ellas realizadas en la altitud del C.A.R. de Sierra Nevada bajo la supervisión de Roberto Cejuela, quien colabora en su preparación junto al técnico leonés José Enrique Villacorta.

La de Dessau será la piedra de toque que determine la posible participación de Aláiz en más pruebas de obstáculos (ya sobre la distancia olímpica de los 3.000 metros) en la presente campaña, por lo que su calendario de competiciones quedará condicionado en gran medida por su actuación y sensaciones en la carrera del viernes.

«Esta carrera será para mí una especie de fin de ciclo tras todos estos años de sinsabores. Aunque ya no tengo dolores, no quiero pensar en las carreras de obstáculos como un objetivo sino que estoy centrado en preparar los 5.000 metros y las pruebas lisas, pero si acabo con buenas sensaciones quizás intente aprovechar la bala que me puede quedar este año en los 3.000 obstáculos. Acudo a Dessau sin ninguna responsabilidad pero me gustaría acercarme a los 5:30», explica Roberto antes de viajar a Alemania.