Un inesperado contratiempo físico «amargó» el Mundial de Media Maratón a Jorge Blanco

El atleta del Playas de Castellón se mostró «frustrado y decepcionado«, porque este problema no le permitiera exprimirse »al cien por cien y poder plasmar el trabajo de meses y las últimas semanas de entrenamiento«.

Ello a pesar de que hasta el kilómetro 10 de carrera -de los algo más de 21 de que se compone la distancia- «las sensaciones eran ideales y muy prometedoras para poder hacer una gran carrera y estar, sin duda, mejorando la marca personal, en torno a 1:02.30».

Sin embargo, las molestias que se prolongaron entre los kilómetros 11 y 15 le obligaron a detenerse en varias ocasiones, con el fin de intentar recuperarse para al menos concluir la prueba, algo que hizo con un tiempo de 1:05.31, muy alejado de su mejor registro.

«La verdad es que iba me iba reteniendo para intentar rematar, como suelo hacer, en los últimos cinco mil metros, pero fue casi una lucha por intentar terminar como pudiera en una carrera trampa, sube y baja, lo que hizo que se acusara en el tramo final«, ha explicado.

La noticia positiva del combinado español es la tercera plaza por equipos a nivel europeo -octavo en la general final- en una disciplina de claro color africano y donde se impuso el nuevo joven prodigio ugandés de 19 años Jacob Kiplimo, siendo Ayad Landassen el primer español en el puesto 31 con un tiempo de 1:01.21.

Después de esta vuelta a la selección española cuatro años después de disputar los 3.000 metros obstáculos en los Juegos Iberoamericanos de Río de Janeiro (Brasil) en 2016, Blanco prefiere «quedarse con lo positivo y pensar que es una distancia que puede encajar de cara al futuro».