El 'tour' europeo del Abanca Ademar: 13.000 kilómetros en cinco días para jugar tres partidos

Manolo Cadenas explotó tras la última derrota de su equipo, que apenas había gozado de 48 horas de descanso tras superar a uno de los mejores equipos de Europa -el Wisla Plock- y se tenía que medir al Puente Genil. «Siento que no podemos preparar los partidos», confesaba el técnico marista, consciente de lo que se les venía por delante.

En estos próximos cinco días, el conjunto leonés asumirá un castigo extenuante bajo el beneplácito de los estamentos del balonmano.

Apenas unas horas después de jugar su último partido de la Liga Sacyr Asobal, esta misma mañana la expedición ademarista ha puesto rumbo a Rusia. León-Madrid, Madrid-Estambul y Estambul-Moscú para llegar en la madrugada del sábado a la capital moscovita y disputar un choque contra el Chehovski (a las 17:00 horas).

Pero una vez acabado el partido, no hay tiempo para el descanso. El domingo, toca regresar al aeropuerto rumbo de nuevo a Estambul (Turquía), donde harán escala para continuar su viaje con destino a Skopje (Macedonia). Allí les espera el último partido de la fase de grupos de la Liga Europea ante el Metalurg, que se celebrará el martes.

Y tras finalizar ese encuentro, y sin tiempo que perder, el Abanca Ademar volverá al avión para, con escala de nuevo en Estambul (Turquía) volar a Valencia y desde allí, en autobús, a Madrid, donde el jueves, y en horario de mañana, tendrá que medirse en la Copa del Rey al Bada Huesca.

En total serán 13.000 kilómetros, a través de cinco países, en cinco días para disputar tres partidos y sin apenas poder hacer otra cosa que jugar un encuentro tras otro y teniendo que rendir a un nivel de élite.