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Tras haber puesto fin a una temproada inusual, los problemas no se terminan para el Abanca Ademar. Seis jugadores y Juanin García han decidido presentar una demanda por impagos al club, así como por despido improcedente. Fede Vieyra, Juanjo Fernández, Gonzalo Carou, el capitán Mario ... López, Dzmitry Patoski e Ivan Mosic han presentado sus demandas tras considerar que sus derechos laborales han sido vulnerados. A ellos, se une el exjugador Juanin García.
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Todos ellos, salvo Mario López, saben que su futuro se encuentra lejos del Palacio de los Deportes. Sin embargo, el extremo leonés, y capitán del equipo, tiene pactada una renovación por dos años, aunque aún no ha firmado nada. El jugador no ha cambaido de opinión, «yo pretendo seguir en el club», pero afirma que tras su decisión en los despachos, «no sé si afectará a nuestra relación».
Según López,« lo único que estamos haciendo es defender nuestros derechos laborales como cualquier otro trabajador». Y es que, tal y como explica, «el club entiende que en esa fecha tiene que darme de baja y yo entiendo que eso no es así», una postura en la que ninguna de las partes tiene intención de ceder, aunque la buena voluntad para llegar a un acuerdo existe:
«Voy a pedirlo porque creo que es un dinero que me corresponde, pero no me corre prisa cobrarlo, se puede llegar a un acuerdo para que el club me lo pague cuando le venga mejor», indica el capitán de la plantilla que dirige Manolo Cadenas y en la que tiene intención de continuar al menos el próximo año.«Lo que tiene que ver con un tema laboral 19-20 no debería afectar a un acuerdo de palabra cerrado que lleva en pie más de dos meses. Yo tengo palabra y llevo esperando este tiempo a poder firmar, entiendo y quiero pensar que no se va a mezclar lo deportivo con lo laboral».
El extremo asegura que entiende el carácter «especial» que tiene una situación «que es nueva para todos», que nace « dado a las circunstancias en las que ha terminado la temporada». Para él, no es otra cosa que «un desacuerdo» que se puede solventar hablando.
«Yo creo que es un problema que surge ante una situación especial, una decisión que yo entiendo que el club toma pensando que es correcta pero que nosotros entendemos que no», expresa Mario López.«Creo que podemos llegar bien a buen puerto y cerrar un acuerdo, pero también depende de la reacción del club y la postura por la que opta. Lo complicado de esto es que ambas partes piensan que tienen la razón, entonces si no hay acuerdo, tendrá que ser el juez quien decida», señala.
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De hecho, su intención de seguir en el club es tal, que el jugador continúa trabajando con el preparador físico.«Nosotros dejamos de formar parte del club el 5 de mayo, sin embargo yo sigo recibiendo instrucciones para 'trabajar' desde casa. Eso se contradice», lamenta el joven jugador leonés, que finaliza con una confesión:«Siendo sincero, y espero equivocarme,creo que afectará a mi renovación»
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