A las puertas de un triunfo sobresaliente

En la orilla. Ahí se ha quedado el Abanca Ademar, que rozó un triunfo de enorme prestigio e importancia en Granollers, pero se conformó con el empate. Un gol a falta de tres segundos de los catalanes dejó el botín leonés en tan sólo un punto después del empate 30-30 vivido en un encuentro vibrante e igualado que acabó con resultado neutral.

Es una de las canchas, en mayúsculas, de la Liga Asobal, y el Abanca Ademar salió con el propósito de aguantar el envite inicial que Granollers propuso.

Los vallesanos impusieron un ritmo alto de juego, con muchos ataques, al que los maristas se tuvieron que adaptar. Las defensas apenas daban a basto en los primeros minutos, con los catalanes por delante.

El cuadro de Dani Gordo tuvo unos minutos de lucidez que le sirvieron para ponerse por delante (4-6) con Rodrigo liderando a los leoneses. Pero la reacción local no se hizo esperar, encabezada por su portero, Roberto Rodríguez.

Con un parcial 4-0, los vallesanos lograron una ventaja de dos puntos y la inercia hacía pensar en que era un momento clave del partido. Y es que la defensa marista era incapaz de frenar a Granollers, que había encontrado en su portero un gran argumento para ganar.

Los de Antonio Rama llegaron a los tres goles de renta y Dani Gordo paró el partido. No podía permitir que el partido se escapase y la sensación era que podía suceder.

Esta intervención del técnico marista, junto a la entrada de Álvaro Pérez en portería, sirvió para controlar la situación. La diferencia se mantuvo estable, con Marwan haciendo daño desde nueve metros. Y, cuando encontró su momento, el equipo leonés asestó un golpe para igualar el choque (14-14).

Aun así, en este partido con tantas alternativas y con tantos fogonazos, Granollers se sacó de la manga otro pequeño parcial 3-1, culminado con un gol fugaz en los últimos segundos de la primera mitad, para irse con dos goles de ventaja al descanso (17-15).

La igualdad y la tensión en cada acción se mantuvo en la segunda mitad. Pero se dio otro momento delicado para el Abanca Ademar cuando Granollers logró recuperar su máxima ventaja (21-18). De nuevo, los leoneses se agarraron al choque para firmar un parcial 0-2 y seguir apretando a los locales.

Esa era la tónica de un encuentro igualado, de poder a poder. Los maristas sabían que sus opciones de ir a Europa por la vía liguera pasaban por ganar en Granollers. Y los vallesanos no querían invitar a un nuevo contendiente a esa batalla.

Había vida para Abanca Ademar. Vaya que si había vida. Los leoneses empataron superado el minuto 40 (22-22) en un momento donde, a diferencia de la primera parte, eran las defensas quienes se hacían fuertes.

La inercia ahora empujaba a los leoneses, que recuperaron la ventaja en el marcador cuando se superaba el ecuador de la segunda mitad y llegaron a alcanzar los dos goles de renta (24-26) con Marwan y Rodrigo como grandes ejecutores.

El partido entró en plena ebullición, con un Abanca Ademar buscando mantener la renta y los vallesanos, evidentemente, tratando de igualar. Un exmarista, Antonio García, igualó a falta de cinco minutos para el final (28-28).

En este tramo final donde los maristas necesitaban de sus principales bazas sufrieron la mala noticia de la lesión en el tobillo izquierdo de Rodrigo. Los maristas tenían que hacer frente también a este contratiempo.

Los últimos minutos fueron muy tensos. Adri Fernández volvió a poner por delante a los maristas (29-30) y dos paradas de Álvaro Pérez y una de Panitti dejaron este resultado hasta el minuto final, con Granollers defendiendo muy abierto para incomodar a los leoneses. Pero un gol a falta de tres segundos (30-30) dejó a los leoneses con un escaso botín para lo que habían tenido entre menos y Europa se aleja casi de forma definitiva. Siempre quedará la Copa.

• Temas
• Ademar