La despedida no fue la ideal

No es el adiós que el Abanca Ademar quería. Pero es el que se ha dado. El conjunto leonés se despide de la Liga Europea acabando último de grupo tras perder en Eslovenia (28-25) ante el Gorenje Velenje en un choque donde los maristas siempre fueron por detrás, pero que lucharon hasta el final.

El Abanca Ademar, sin nada en juego más allá del deber de ganar, inherente al escudo marista, comenzó el partido con rotaciones en su siete inicial, dando cabida a Rozada, Zapico o Miñambres en un equipo donde Marawan y Saeid - pese a estar este último en el banquillo - eran baja.

No salió bien el equipo marista, atascado en ataque, sin lograr claridad ni fluidez ante el cerrado 6-0 defensivo del equipo balcánico. Álvaro Pérez, que estuvo a buen nivel, mantuvo a flote a un Abanca Ademar que tardó en arrancar.

Gorenje Velenje tenía las primeras ventajas. El mal momento del posicional marista, ejemplificado en un Wasiak errático, daba opciones de contragolpe a los eslovenos. Y no las desaprovechaban (3-1).

Con un Dani Gordo ya dando instrucciones desde el inicio, airado con el inicio de los suyos, el conjunto marista se apoyó en la defensa y en Álvaro Pérez para empatar el choque (4-4) en el minuto 12. Pero los leoneses iban a remolque en todo momento.

El partido, sin embargo, estaba en un momento de rachas: Velenje lograba dos goles de renta, Ademar igualaba. El ataque leonés era algo más efectivo gracias a un Edu Fernández atrevido e inspirado que dio soluciones en nueve metros a los de Dani Gordo.

Pero los maristas se toparon con un Skok en la meta eslovena a gran nivel que les mantuvo 'secos' durante varios minutos, lo que Gorenje Velenje aprovechó para irse a los cinco goles de diferencia (13-8).

El negado ataque marista, alguna decisión arbitral cuestionable y los contragolpes concedidos daban alas a los eslovenos. Un parcial 0-2 marista en el tramo final de la primera mitad sirvió para maquillar el marcador justo antes del descanso (14-10), pero la montaña a escalar para irse con buen sabor de boca de Europa era, todavía, importante.

La segunda mitad comenzó con los dos equipos menos atinados en ataque, gracias en parte a la defensa 5-1, con Sergio Sánchez en el avanzado, que planteaba Dani Gordo. Pero todo se vino abajo con una inentendible tarjeta roja a Carlos Álvarez que no merecía más que una exclusión.

Trató de aguantar el tipo el Abanca Ademar, pero la brecha era cada vez mayor: ya se iba a los seis goles (19-13) en el minuto 37 de juego con un Abanca Ademar insultantemente joven con hombres como Sergio Sánchez (17 años), Álvaro Fernández (20 años), Álvaro Pérez (19 años), Miñambres (20 años), Zapico o Alberto Martín (22 años) en cancha.

El conjunto leonés sacó su casta para, pese a la ausencia de Carlos Álvarez y un arbitraje muy controvertido con los maristas, seguir en partido. Gorenje Velenje, ante una defensa leonesa muy móvil, no encontró con tanta facilidad la meta de Pérez y los de Dani Gordo se pusieron a tres goles (22-19) en el minuto 48. Los eslovenos paraban el partido.

El tiempo muerto sentó bien a los balcánicos, que firmaron un parcial 2-0 para encauzar de nuevo el partido de su lado. Pero no iba a ser tan sencillo y los leoneses volvieron a ponerse a tres goles: no querían irse sin pelear.

El Abanca Ademar empezó a creer todavía más, porque con otro parcial 0-2, un Miñambres muy acertado y una defensa cada vez más crecida, la diferencia era de dos goles (26-24): Gorenje Velenje pedía otra vez tiempo muerto.

A un mnuto del final, los leoneses estaban a dos goles. Y el arbitraje volvió a jugar en contra de los maristas, permitiendo un ataque dilatado para los balcánicos, sin presionar con la amenaza de pasivo.

El Abanca Ademar acabó perdiendo en Eslovenia (28-25) y acaba su periplo europeo como último de grupo tras un partido en el que no se dejó llevar ni bajó los brazos.

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