El Abanca Ademar saca la garra en la segunda mitad para llevarse un emocionante derbi

Tras las dudas creadas por el empate ante Bada Huesca en el Palacio, el Abanca Ademar afrontaba el derbi, no solo con el reto de contabilizar sus salidas por victorias, sino para despejar esos posibles interrogantes.

No fue el inicio propicio para dicho cometido ni lo fue el partido en general. Recoletas Atlético Valladolid encontró con facilidad la meta de Dino Slavic, aunque el Abanca Ademar supo aguantar el ritmo goleador de los locales pese a la ausencia de su mayor exponente ofensivo, David Fernández que, renqueante, estaba en el banquillo.

Fue un choque extraño. Ocho goles en los primeros cinco minutos y un ritmo que no aflojó, con ataques rápidos y defensas superadas por completo, dispararon un marcador que rápidamente llegó a los diez tantos. Ambos entrenadores buscaban soluciones a esta sangría defensiva, si bien es cierto que Atlético Valladolid mandaba en el luminoso.

Rubén Río y Juanjo Fernández, que ocupaba el lateral izquierdo de David Fernández, eran los más destacados en las ofensivas de ambos conjuntos. Los cambios de Cadenas eran constantes, quien retiró de la cancha, incluso, a Slavic: el croata no estaba tocando ni un balón.

El momento crítico para el cuadro marista llegó en torno a los 20 minutos de juego, cuando Atlético Valladolid logró una renta de tres goles que pudo ser de cuatro, pero Patotski salvó un contraataque pucelano. Supo levantarse el Abanca Ademar de esta situación, en la que caminaba por el alambre para dejar, finalmente, la desventaja en dos goles al descanso.

No fueron mejores las sensaciones ademaristas tras el descanso. Las pérdidas y la inoperancia defensiva elevaron la losa a levantar hasta los cuatro goles, la máxima renta para los de David Pisonero, lo que obligó a Cadenas a pedir tiempo muerto, visiblemente molesto con lo que estaba sucediendo sobre la cancha.

Pero fue el prolegómeno de la reacción leonesa. Con una defensa más intensa y acertada, con Patotski tocando más balón, el Abanca Ademar firmó un parcial 1-5 que igualó el choque pese a determinadas pérdidas en ataque que retrasaron este equilibrio en el luminoso.

La inercio llevó al Abanca Ademar en volandas. La defensa de los de Cadenas, mucho más sólida que en minutos anteriores, traspasó las dudas a los de Pisonero y el parcial se elevó a 1-8 para dar una renta de hasta tres goles para los maristas.

Aun así, con una doble exclusión en contra de los de Cadenas, el marcador volvió a estrecharse y no se igualó gracias a otra enorme intervención de Patotski. El bielorruso fue protagonista destacado en esta segunda mitad y salvó, en varias ocasiones, el empate del partido en unos minutos donde los maristas fueron castigados con varias exclusiones.

En los últimos minutos, la emoción fue total. Atlético Valladolid igualó el encuentro y, durante un par de minutos, el partido fue un intercambio de goles, donde Acacio tomó las riendas y se jugó los lanzamientos - con éxito - en el Abanca Ademar.

En el último minuto, el Abanca Ademar provocó una falta de ataque que acabó en un contraataque donde Mario López para poner una renta de dos goles que fue decisiva en el partido. El derbi viajó a León y el Abanca Ademar despeja en parte sus dudas antes de recibir en el Palacio al Gorenje Velenje.