El Ademar sufre y vuelve a vencer lejos del Palacio

Era el momento de volver a ganar fuera de casa y así lo hizo el Abanca Ademar. El conjunto leonés logró imponerse (25-27) en un pabellón siempre difícil como es el de Villa de Aranda, que, además, vistió una de las mejores entradas de la temporada. Los de Dani Gordo no tuvieron su mejor día, pero aprovecharon las debilidades defensivas del Villa de Aranda para remontar en el segundo tiempo y acabar manteniendo su renta hasta el pitido final del choque.

Con las ausencias de Popovic y, finalmente, la recuperación de Adrián Fernández y de Rubén Rozada, Dani Gordo saltó con un siete reconocible al Santiago Manguán. Las gradas del pabellón arandino, como es habitual, mostraban un gran aspecto, un condicionante a tener en cuenta durante el partido.

Sin un gran ritmo en los ataques, Edu Fernández y Marwan se encargaron de firmar el primer parcial 0-2 para abrir el marcador. En defensa, los leoneses se asentaron en el 6-0 habitual en busca de mantener al pivote aislado de la jugada, aunque no tardaría Villa de Aranda en replicar la renta inicial para poner el empate (2-2).

El cuadro de Dani Gordo no supo aprovechar la primera superioridad tras la exclusión de Rogonovs y, de hecho, los minutos posteriores fueron de dominio local. Dani Gordo intentó rotar la primera línea con la idea de dar aire fresco, pero la realidad es que los maristas no conseguía superar la buena defensa arandina. Esto lo aprovecharon los de Javi Márquez para ponerse por delante (5-3).

El técnico, en busca de la fórmula para levantar a su equipo, sumó a la causa también a Álvaro Pérez en detrimento de Saeid. Sin embargo, eran muchos los errores que estaba cometiendo el Abanca Ademar, tanto en el ataque posicional como al contragolpe, uno de los puntos fuertes del cuadro leonés que no lograba aprovechar. Mientras tanto, el ataque arandino siguió carburando para mantenerse por delante (8-6).

Lejos de recomponerse con los cambios, el equipo ademarista seguía sin encontrarse y Villa de Aranda se mantuvo firme en ataque para abrir una renta de cuatro tantos (10-6). Tras el primer tiempo muerto del choque, se produjo un veloz intercambio de golpes que no trastocó la renta de los locales (13-9).

La realidad es que las defensas no estaban siendo capaces de sostener los ataques de ambos bandos, sobre todo en clave marista. El conjunto de Aranda, ante las dificultades de llegar a los seis metros, optaba por el lanzamiento exterior. Los últimos minutos del primer acto esbozaron las dificultades de ambos conjuntos también en el ataque, con protagonismo de Guitart y, sobre todo, de un Álvaro Pérez que se marchó al descanso por encima del cuarenta por ciento de paradas.

Los de Dani Gordo se fueron al descanso después de haber acortado la renta a dos tantos (13-11), sin encontrar buenas sensaciones en ataque y encomendándose a su joven guardameta para mantenerse dentro del partido. Salió el conjunto leonés algo mejor en ataque tras la reanudación, aunque se encontró con Pau Guitart.

Con Sergio Sánchez como principal exponente goleador desde el extremo zurdo, el Abanca Ademar fue mejorando hasta encontrar el empate en el luminoso (16-16). Carlos Álvarez puso al Abanca Ademar por delante en el marcador por primera vez desde el minuto tres, algo que obligó a Javi Márquez a parar el choque.

No sirvió este parón a los arandinos frente a un conjunto leonés que mantuvo su arreón ofensivo hasta encontrar la renta máxima de tres goles (16-19). El Villa de Aranda sufría con la defensa 5-1 leonesa, aunque no le perdió la cara al partido en ningún momento y redujo la diferencia a un tanto en el ecuador del segundo acto (19-20).

Los maristas llegaron a tener bola para ponerse con cuatro de ventaja, pero Marwan la perdió y, tras el tanto de Berbel a puerta vacía, Dani Gordo paró el encuentro (22-24). A ocho minutos del final, el Abanca Ademar debía meter una marcha más para acabar de decantar un encuentro reñido de principio a fin.

Sin embargo, el equipo leonés no mejoró sus prestaciones en el tramo final y mantuvo a Villa de Aranda cerca hasta el último minuto. A falta de menos de un minuto, de hecho, los locales contaron con posesión para empatar, pero no fueron capaces de materializarla y fue Rodri Pérez el que se encargó de cerrar el partido (25-27). Así, el Abanca Ademar sufrió para acabar llevándose el partido y ganar dos puntos muy valiosos fuera de casa.