El Abanca Ademar se desploma ante la sensación de la Liga Asobal

No cabía en los planes de los aficionados ademaristas ver una derrota así de su equipo y todo ello a pesar de que llegaba a la pista leonesa un conjunto enrachado. Y menos aún con los primeros compases de juego, en los que lograron un parcial de salida de 3-0.

Sin embargo, todo fue un espejismo. Alejandro Mozos había preparado una 'trampa' y el Abanca Ademar cayó en ella. Los jugadores visitantes lograron 'secar' a los mejores hombres de Cadenas y dejaron en guarismos poco comunes a los puntales ofensivos.

Hasta el ecuador, lograron dominar los locales. Pero hasta ahí. Un incontestable parcial de 0-7, que el técnico de Valdevimbre trató de evitar desde el banquillo -sin lograrlo- con hasta dos tiempos muertos conducía al Balonmano Torrelavega al 8-13. La defensa empezaba a ser un coladero, el ataque era errático y poco fiable, lo que permitió a los visitantes irse al descanso con un sorprendente 11-18.

Era el momento de la épica, de las remontadas a las que tanto acostumbra el Ademar a su gente. La grada lo sabía, Cadenas apretaba y veía una exclusión de salida, pero esta tarde nada iba a salir bien en el Municipal. Se mostró incapaz, falto de argumentos para sobreponerse a un rival gigante, y ni en el ataque posicional ni en los cambios de defensa se lograba dar con la tecla.

La renta no hizo sino crecer, hasta los diez goles, cuando en el minuto 38 ya era de 14-24 para desesperación de la parroquia leonesa.

El Abanca Ademar no reaccionaba y Torrelavega seguía a lo suyo. Isi Martínez se salía en el que un día volverá a ser su casa y sus compañeros le secundaban. Todo lo contrario en el bando leonés, con unos paupérrimos bagajes en portería y escaso acierto en la definición.

La diferencia siempre fue muy favorable a los cántabros, que ni sufrieron en León. A diez minutos del final, mismo resultado: más 10 para los visitantes y el público comenzaba a abandonar el Palacio antes de llegarse al resultado final de 28-36 que deja tocada la moral del Ademar.