Europa devuelve el corazón a un Abanca Ademar que se acerca al pase de ronda

El conjunto marista saltó a la cancha con el propósito de enmendar los malos partidos de este regreso a la competición. Enfrente estaba un equipo ruso con un gran potencial ofensivo que iba a poner a prueba la endeble defensa leonesa de los últimos encuentros.

Por momentos, la defensa daba síntomas de mejoría, con Slavic parando balones y la zaga frenando a la primera línea de Chekhovskie, pero el ataque fallaba. Con un sistema 5-1 para tratar de incomodar a Lucin, el Abanca Ademar sufrió en el posicional hasta que Kisselev empezó a anotar desde nueve metros.

Con el cántabro soltando el brazo, los maristas igualaron el partido y comenzaron a mejorar en la faceta ofensivo, donde la conexión con Rubén Marchán empezó a funcionar y la defensa, por momentos, tenía instantes de lucidez que, o bien se remataban al contragolpe, o se perdían, en ocasiones, en errores inocentes del ataque marista.

Llegó a tener dos goles de ventaja el Abanca Ademar que, en el tramo final de la primera mitad, volvió a tener una desconexión. Con un parcial 0-4, Chekhovskie dio la vuelta al marcador y logró una interesante renta de tres goles que Gonzalo maquilló antes del descanso (17-19), pero con la sensación de que, al menos en defensa, el equipo tenía mucho que mejorar.

El partido se mantuvo en estos derroteros en los primeros compases de la segunda mitad. La renta rusa oscilaba entre uno y dos goles hasta que ocurrió un hecho diferencial: la estrella del Chekhovskie, Kosorotov, veía la tarjeta roja descalificante por un manotazo en la cara de Lucin.

Esto frenó la confianza en ataque de los visitantes e hizo crecer a un Abanca Ademar que, sin el referente ofensivo de su rival, empezó a crecer. A esas dudas contribuyó Cadenas con una defensa con avanzado que dificultó la circulación de la primera línea rusa y el conjunto marista dio la vuelta al marcador, con opciones marradas para ampliar la renta de un gol en el ecuador del segundo acto.

Aun así, el ataque posicional del Abanca Ademar volvió a atascarse. El acierto de Tin Lucin no era eterno - tampoco las energías del croata - y el partido se igualó por completo ante un Chekhovskie que encontró en Kiselev a su 'relevo' a Kosorotov.

El partido se movió en un marcador equilibrado, pero siempre con los rusos por delante. Con dificultades en el posicional que, de nuevo, como en este partido y los anteriores, estaba sin ideas ni claridad, los maristas lo intentaron hasta el final, con Lucin tirando del carro, con orgullo.

Se puso el final de cara al conjunto leonés con una doble exclusión rusa que intentaron aprovechar los de Cadenas con una defensa muy abierta (4-2), situación que se prolongó por otra sanción de dos minutos más para los visitantes cuando recuperaban a un efectivo.

La victoria se quedó en León gracias a una defensa efectiva con la doble superioridad marista y que confirmaron a la contra, de nuevo, con un Gonzalo imperial en los últimos minutos. Una última recuperación y un ataque donde el partido ya estaba resuelto fueron el broche a un encuentro donde los maristas se reencontraron con la victoria y dieron un paso más hacia la siguiente fase.