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Qué llueve. No pasa nada. Porque nadie le dice que no a una castaña del Bierzo.
Y por ello y pese a que lo intentó sin dar un tregua ni un minuto, la lluvia no logró ahogar el magosto que se ha celebrado en la tarde de este sábado en la plaza de San Marcelo.
Con paraguas en mano y armándose de paciencia, han sido cientos de leoneses y visitantes los que han podido disfrutar del sabor de otoño por excelencia.
Imposible resistirse, en tiempo de fríos, a disfrutar de unas castañas y más si son del Bierzo y todo gracias al buen hacer de las 60 personas del CIT de Santa Marina del Sil que desafiaron a la lluvia como pocos.
10 tambores sobre una hilera de fuego de leña para sacar nada más y nada menos que 3.000 kilos de castañas repartidas en seis tamboradas que han hecho las delicias de todo el que se acercó a la plaza.
No hubo danzas pero sí sones tradicionales que amenizaron este tradicional magosto enmarcado en la Capitalidad Gastronómica, promovido por el Ayuntamiento de León y en el que lo único que importaba era disfrutar del mejor sabor de El Bierzo, del mejor sabor de León.
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Almudena Santos y Lidia Carvajal
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
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