El método de los cuatro alimentos: aprender a comer sin remordimiento

De cara a las fiestas navideñas y la cantidad de comidas y cenas copiosas, dulces pesados y bebidas con alto contenido de calorías. El método de los cuatro elementos se presenta como una opción para evitar la culpa a la hora de alimentarse el resto de días 'no festivos'.

Ya que, más allá de hacer algún tipo de dieta, lo importante es conseguir un equilibrio entre los macro y los micro nutrientes, según explica Fran Sabal, autora del libro 'Nutrición emocional'. «No es necesario restringir grupos alimentarios como las grasas saludables o los carbohidratos, ya que son esenciales para el cuerpo. La clave está en aprender a combinarlos para nutrirnos de forma saludable». Aclara.

Para nutrirse de forma saludable la especialista invita a seguir el 'Método de los cuatro elementos', que consiste en combinar proteínas, hidratos de carbono, grasas saludables y vitaminas y minerales.

Proteínas. Se encuentran principalmente en las carnes, carnes vegetales, pescados, mariscos, huevos, lácteos y legumbres.

Hidratos de carbono: Se obtienen en los cereales como la pasta, el arroz, la avena, quinoa, harinas, entre otras, pero debemos consumirlos de forma integral, ya que integral viene de la palabra íntegro lo cual significa que conserva sus propiedades naturales.

Grasas saludables: Se encuentran en el aceite de oliva, los frutos secos, las semillas, el aguacate, el coco o las aceitunas, entre otros.

Vitaminas y minerales: Se encuentran en todos los alimentos, pero principalmente se obtienen de las frutas y verduras.

Desayuno: Una opción es una taza de leche desnatada, dos rebanadas de pan integral con aguacate y tomate y una pieza de fruta. Es un desayuno nutritivo y fácil de preparar que combina los elementos 1, 2, 3 y 4 con proteínas (leche), hidratos (pan integral), con grasas saludables (aguacate), frutas y verduras (tomate y la pieza de fruta).

Media mañana: Un yogur natural desnatado con dos cucharadas de avena y frutas. En esta propuesta combina las proteínas (yogur), con los hidratos de carbono (avena), las frutas (frutos rojos) y las grasas saludables (frutos secos)

Comida: Quinoa con pollo. Un plato al que se le pueden añadir aceitunas, brotes verdes, tomate, maíz, zanahoria, sal, pimiento y aceite. Combina las proteínas del pollo, los hidratos de carbono de la quinoa, las grasas saludables del aceite de oliva y las aceitunas y las verduras de la zanahoria, el tomate, el maíz y los brotes verdes.

Merienda: Galletas de avena. Una merienda hecha al horno con plátanos, harina de avena, copos de avena, nueces, chocolate, canela y edulcorante. Combina el grupo de frutos y verduras con el plátano, los hidratos de carbono con la harina de avena y los copos de avena y las grasas saludables con la taza de nueces.

Cena: Bowl de salmón. Para realizarlo se utilizará salmón, arroz integral, aceite de oliva, aguacate, brotes verdes, tomate, pepino, cebolla, maíz, limón, sal y pimienta. Combina las proteínas y las grasas saludables del salmón, con los hidratos de carbono del arroz integral, las grasas saludables del aguacate y del aceite de oliva y las verduras de los brotes verdes, el tomate, el pimiento, el pepino y la cebolla.