La Universidad de León expresa su pesar por el fallecimiento de Eugenio de Nora

Eugenio de Nora tenía 94 años y fue uno de los creadores de la poesía testimonial o civil. Su muerte se produjo la pasada madrugada a consecuencia de una insuficiencia respiratoria. El poeta leonés falleció en un hospital de Madrid, en donde había sido ingresado hace cinco semanas tras sufrir un proceso gripal que se complicó con otras dolencias agravadas por su avanzada edad.

Estaba considerado como uno de los poetas existenciales más importantes de España, conocido como gran poeta social de la posguerra y renovador de la poesía de su época, además de crítico literario y profesor de prestigio internacional. Nacido en Zacos (León) el 13 de noviembre de 1923, se trasladó a León junto a su familia en 1932, y en 1941 a Madrid donde se instaló en la Residencia de Estudiantes.

Doctor en Filología románica, Eugenio de Nora fundó en 1944, junto con Antonio González de Lama y Victoriano Crémer la conocida revista literaria de poesía comprometida 'Espadaña'. Pocos años después, en 1949, salió de España para trabajar como lector en la Universidad de Berna (Suiza), donde después sería catedrático titular de Literatura. En 1989 se jubiló y volvió con su familia a Madrid. Su producción poética abarca títulos como 'Cantos al destino' (1945), 'Pueblo cautivo' (1945-46) una inteligente crítica del régimen franquista, 'Amor prometido' (1946), 'Contemplación del tiempo' (1948), 'Siempre' (1953) y 'España, pasión de vida' (1953), con la que ganó el Premio Boscán de poesía. Gran parte de su obra la escribió en la Residencia de Estudiantes.

Traductor, entre otros, de T.S. Elliot, W.B. Yeats, Paul Claudel, Paul Válery, Jean Cocteau, Pierre Emmanuel y Eugenio Montale, escribió ensayos sobre Antonio y Manuel Machado, Vicente Aleixandre, Celaya, Otero, Max Aub, Cela, F. Ayala, Ignacio Aldecoa y José María Merino. Entre sus reconocimientos y logros, además de Premio de las Letras de Castilla y León, y el doctorado Honoris Causa por la Universidad de León (2000), obtuvo un accésit del Premio Adonais en 1947, el Premio Boscán de Poesía en 1953, el Premio de la Crítica en 1958 y el Premio León Felipe en 1998.