Borrar
Javier Ambrossi, Javier Calvo, Supremme de Luxe y Ana Locking.
Todo listo para la segunda temporada de 'Drag Race'

Todo listo para la segunda temporada de 'Drag Race'

«Es doloroso echar a alguien con tanto talento», dice Supremme, la presentadora del talent que empieza el domingo en Atresplayer Premium

Iker Cortés

Madrid

Martes, 22 de marzo 2022, 20:24

Diecinueve emmys y un buen puñado de adaptaciones internacionales avalan 'Drag Race', el 'talent-show' en el que varias reinas de la noche compiten, a través de diversos retos y de batallas de lip-sync, por ser la mejor. Tras el éxito de la primera ... temporada, estrenada en mayo del pasado año -la versión española ha sido la mejor valorada por IMDB, la base de datos más importante de cine y televisión-, este domingo, a las 20:00 horas, se pone en marcha la segunda en Atresplayer Premium con importantes novedades. Para empezar, dice Steve Kelly, director del formato, los ocho episodios pasan a ser diez y las participantes aumentarán de diez a doce. Todas ellas tratarán de estar a la altura de Carmen Farala, la ganadora de la temporada anterior.

Cuenta Carmen Ferreiro, directora de Programas de Entretenimiento de Atresmedia, que si hay una palabra que defina esta nueva temporada es 'más'. «Más espectáculo, más show, más humor, más capítulos, más reinas, más talento, más invitados, más carisma y más implicación del jurado», describe la directiva, que prefiere no desvelar las sorpresas que configurarán un concurso que contará con Gloria Trevi como jefa invitada de un jurado que, eso sí, repite.

La genial Supremme de Luxe volverá como maestra de ceremonias, junto a los Javis -Calvo y Ambrossi- y la diseñadora Ana Locking. Locking, por cierto, se ha encargado de crear el vestuario de fantasía con el que Supremme de Luxe amenizará todas las veladas.

Cuenta Supremme de Luxe que han vivido la grabación del programa de forma «muy intensa». «Siento mucha emoción con cualquier cosa y este año vais a ver que lo hemos pasado mucho peor. Tienen mucho talento y es muy complicado mandar a alguien con mucho talento a su casas», advierte la presentadora.

Coincide en ello Javier Calvo. «El primer día nos dimos cuenta de que la temporada venía muy fuerte, de que el nivel estaba altísimo y de que lo íbamos a pasar muy mal. Muchas veces hemos parado la grabación y hemos salido a debatir a quién expulsábamos». «Casi siempre», apostilla su pareja, Ambrossi, entre risas. Tanto que algunos de los invitados que han acudido al programa les reprochaban que «habían venido a pasarlo bien» y que «aquello era un drama», comentan entre risas.

No parece, sin embargo, que el tono del espacio vaya a cambiar. En estos tiempos en el que los realities y los 'talent-shows' están en tela de juicio, 'Drag Race' apuesta por evitar, en la medida de lo posible, el salseo y la polémica. «Yo no quiero ser más cañera, quiero un 'talent' en el que seamos amables y en el que sepamos valorar el esfuerzo», apunta la presentadora. Precisamente, dice Calvo, es uno de los aspectos que más han gustado fuera de España. «Nos han dicho que se notaba que teníamos empatía, que no les dábamos caña por darles caña, sino que queríamos que estuvieran bien. Solo desde la seguridad, la tranquilidad y la libertad surge la creatividad y algo auténtico. Los actores y actrices solo brillan cuando están seguros de sí mismos», sentencia. «Hemos hecho marca de ello y vamos a seguir haciéndolo así», continúa Ambrossi.

Menos fiel al original

No esconden que al ser un programa tan conocido y con tanta vida fuera de España, en la primera temporada estaban algo más cohibidos. «Teníamos miedo, es un programa icónico, que habíamos visto mucho, y podía jugar en nuestra contra. Intentábamos ser más fieles. Pero después nos han reconocido mucho el cariño y la cercanía con las concursantes y ahora no estamos siendo tan fieles», cuenta Ambrossi, que se ha tomado esta nueva edición con otros aires: «Quiero que me pasen cosas, equivocarme, decir tonterías y apostar por mi subjetividad».

Y niegan, en redondo, que las pruebas sean encorsetadas. «Es que es el formato que es. Yo por mucho que quiera cantar con susurros en 'La voz', no voy a poder y me tendré que adaptar al formato y sacar provecho de la adversidad», dice convencida Supremme, que destaca además que si el concurso funciona tan bien «no vamos a ser tan estupidas de cambiarlo». Por su parte, Ana Locking considera que a las reinas les favorecen los retos cerrados. «Son más bonitos y más mágicos, al necesitar de narrativa, que si simplemente les pedimos que utilicen el color rosa para una prueba determinada. Yo creo que las restricciones ayudan a la creatividad», concluye la diseñadora de moda.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

leonoticias Todo listo para la segunda temporada de 'Drag Race'