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J. Moreno
Madrid
Domingo, 26 de abril 2020, 00:33
Más de 400 kilómetros separan Badajoz de Madrid, pero la distancia no impidió a Ángeles Blanco (Badajoz, 47 años) cumplir su vocación: ser periodista para «estar en los sitios en los que ocurrían cosas y poder contarlas». «Mientras mis amigas jugaban saltando a la comba, ... yo la utilizaba como micrófono para narrar historias. Siempre lo tuve claro», recuerda la extremeña. Hace casi tres décadas que llegó a Telecinco, donde tiene el récord de haber pasado por todas las ediciones de sus informativos. «Llegué hace ya casi 27 años después de inundar España de currículums», explica. Una llamada telefónica le citó para una reunión con el periodista Luis Mariñas, que por entonces era el máximo responsable de las noticias del canal. «Era casi una niña y me temblaban las piernas. No te cuento los nervios que sentí cuando Luis Mariñas me recibió en su despacho», rememora.
En Telecinco, Ángeles ha sido redactora de información política, coordinadora, editora y presentadora, en distintas épocas y horarios. Puso en marcha en 1997, junto a un equipo muy reducido, la edición matinal que abría las emisiones diarias de la cadena. «Si el fin de semana es muy complicado, porque no coincides con la familia, el matinal afecta directamente al sueño y por tanto al estado de ánimo y a la salud si no consigues dormir bien durante el día», confiesa. «Entraba sobre la una de la madrugada para prepararlo y salía a las nueve y media de la mañana, después de presentarlo. Es un turno complicado, pero se hace mucha piña con el equipo», añade.
Desde 2017, la periodista se hace cargo de la información del fin de semana junto a José Ribagorda. «Siento contradecir a aquellos que aseguran que en fin de semana la información es más relajada. Para nada. La actualidad es muy intensa, tanto como en los días de diario. Lo único que cambia es la actitud del espectador, porque se puede sentar sin tanta prisa ante el televisor», cuenta.
Sin embargo, el coronavirus ha obligado a cambiar las dinámicas de trabajo. Ángeles se turna con Ribagorda en la presentación del informativo «para no coincidir en la redacción». La crisis sanitaria «ha cambiado mucho la forma de trabajo». «Dadas las complicaciones, estamos haciendo muchas entrevistas por videoconferencia», añade.
Un derecho a la información veraz de los ciudadanos que se ve bombardeado por la proliferación de noticias falsas en redes sociales. ¿Cómo responder desde el periodismo a este auge? «Con toda contundencia», exige Ángeles. «Me da la sensación de que cada vez importa menos si lo que se lee o se ve es real. Creo que hay un sector cada vez más amplio que está dispuesto a creer y a defender noticias falsas porque coincide con su pensamiento o ideología», denuncia.
La extremeña fue víctima de un bulo absurdo con acusaciones en redes sociales en las que se escribía que la presentadora decía «gracias a Dios» mientras informaba de los casos de coronavirus en Alemania. La realidad, fácilmente comprobable reproduciendo la grabación original, era que Ángeles afirmaba «gracias, Dario» en referencia a la conexión anterior con el corresponsal de Telecinco y de este periódico en Roma, Darío Menor. «Lo más curioso es que quienes fomentaron la mentira colgaron el vídeo en el que se podía comprobar que era falso. Pero no importa. Era mucho más divertido echarse unas risas e insultos que comprobar que era todo un invento», lamenta Ángeles. Una situación «terrible» que tampoco le sorprende porque «cada vez pasa con más frecuencia». «Sale gratis y nadie hace nada para impedirlo. Tienes que aguantar ofensas e insultos porque sí. Es una impotencia tremenda».
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