Los trabajadores de la OSCyL muestran su «malestar» con miembros del Consejo Asesor

Gimeno presentó esta semana su dimisión como gerente y director técnico de la Oscyl) después de siete años al frente de la agrupación musical de la Comunidad, de la que también forma parte como músico, concretamente como violinista. Tomó la decisión como consecuencia de las diferencias existentes desde la llegada de un nuevo director de la Fundación Siglo, Juan González Posada, que gestiona la entidad, y después de haber quedado fuera del recién estrenado Consejo Asesor de la Oscyl, precisamente el órgano contra el que ahora cargan el colegio de músicos.

Recordaron en un comunicado que el pasado 8 de mayo la Consejería de Cultura y Turismo publicó una nota de prensa en la cual el consejero, Javier Ortega, comentó que «había mantenido la primera reunión con el recién creado Consejo Asesor de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, cuyo principal objetivo es colaborar, asesorar e informar al Patronato de la Fundación Siglo en todas aquellas materias que considere, además de realizar propuestas para la mejora de la calidad de la Orquesta y de su contribución al desarrollo cultural de la sociedad de Castilla y León».

Los integrantes de la OSCyL, en la actualidad, aseguraron desconocer la «forma en que se ha realizado la elección y las funciones específicas del Consejo Asesor», ya que «en ningún momento» se les informó de su composición. Tampoco de cuales iban a ser los criterios de selección de sus miembros, que en «aras de la transparencia debería conllevar este tipo de decisiones».

En este mismo comunicado se explicaba, citan los trabajadores, que será el consejo Asesor el «encargado de estudiar las propuestas para seleccionar al próximo director titular a partir de la temporada 2021-2022», una vez conocido que Andrew Gourlay no continuaría en el cargo después del verano.

Los músicos defienden en un comunicado que la OSCyL es actualmente considerada «una de las mejores orquestas de España», con una de las más destacadas programaciones en el ámbito nacional, contando en la actualidad con más de 4.000 abonados. En este sentido, «siempre que se han tomado decisiones relevantes que atañen a la OSCyL», recordaron, la Consejería de Cultura ha contado con su opinión y de la Gerencia, «ya que siempre se ha buscado el diálogo y el consenso entre la Orquesta, la Fundación y la Consejería».

Por ello, consideraron que tienen los «suficientes recursos internos para velar por la máxima excelencia» en suactividad. De hecho, el «mejor resultado posible» se observa «día a día» en los conciertos, «con las salas llenas, los aplausos del público y el crecimiento en el número de abonados, el mayor de la historia».

Así, concluye el comunicado, «sin poner en duda la profesionalidad» de los miembros del Consejo Asesor en sus diferentes campos profesionales, insistieron en «algunos de sus miembros no tienen la suficiente relación y experiencia en el mundo sinfónico como para asesorar a la OSCyL» y reclamaron que tengan en cuenta la opinión de los propios músicos.