Ede: «Tener reconocimiento muchas veces no quita la parte precaria de esta profesión»

En la música no se puede comprar una barita mágica para ganar público, ni siquiera alguien te la puede dar. Son muchos los factores que se tienen que dar para eso que llaman 'triunfo'. Ayuda tener una buen voz, realizar composiciones con una bonita sonoridad e incluso hacer algo diferente. Pero para subirte encima de un escenario y entusiasmar a tu público a estos factores hay que añadirle la magia. Imposible de definir pero fácil de localizar.

La madrileña Ede es un claro ejemplo de artista que sabe transmitir y generar emociones a su público. Ella es ella y nada más. Ahora regresa a León para presentar su primer Lp, 'Lucero'.

Un disco que viene con manual de instrucciones, porque para adentrarse en el mundo de Ede hay que seguir un orden. «Idealmente si, quiero que eso se entienda. Es difícil tal y como se consume ahora la música. De hecho hubo un tema que se quedó fuera porque no encajaba con el imaginario que estábamos construyendo», explica Ede.

Una declaración de intenciones en la que lo sentimental prima sobre todo lo demás. «No se hacer música desde otro lado, está es la composición más pura sobre mis impresiones y la vez la más inocente porque no deja de ser mi primer disco», apunta.

Entre Ede y la música hay una relación muy visceral e intuitiva en la que los géneros se mezclan. Pinceladas electrónicas se juntan con ritmos copleros o con el folclore más tradicional. «Ya se ha roto esta mitificación de ciertos géneros, hasta yo he pensado que podía vulnerar un folclore importante para un determinado grupo de personas, pero luego te das cuenta que para nada, que el folclore es tocar con los instrumentos que tienes en casa; es lo más popular, de la calle y de la gente que existe. Lo bueno es que ahora se están permitiendo estas mezclas».

Pero no solo es el como sino el que. Sus letras invitan a reflexionar, a través de su yo generan un nosotros, y eso es algo que Ede tiene presente por eso el valor de la palabra es constante. «Admiro cuando alguien emplea las palabras justas para decir algo con finura y certeza; es algo que me encanta y desde donde me relaciono».

De sus ilusiones, miedos e interrogantes nace este disco que ya está paseando en forma de directo por toda España. Su próxima parada, León. Ede vuelve a subirse al escenario de El Gran Café. «Es una sala a la que le tenemos mucho cariño y a León que nos sorprendió mucho».

Y de nuevo regresa con banda, casualidades de la vida en esta mítica sala de la capital leonesa fue la primera vez que tocaron en directo juntas. «Va ser bonito volver a León porque se cierra un círculo después de encontrar el formato con el que yo quería hacer este disco a nivel acústico».

Una de las cosas más difíciles que tiene la música es arrancar y Ede ya circula por la carretera musical, le quedan muchos baches que pasar. «Ahora mismo con todo lo que hay detrás de un bolo; viaje, pagar a mis músicos que están dados de alta, etc; es decir haciendo las cosas bien, hay bolos en los que pierdo dinero. Tener reconocimiento muchas veces no quita la parte precaria de esta profesión y que es muy difícil arrancar, a pesar de que yo me siento muy afortunada porque tengo un equipo increíble»

Lo importante es que tiene un buen vehículo cargado de ilusión y bien dirigido que económicamente es viable. Porque no hay que olvidar que lo más importante de vivir de la música es vivir.