La música anticipó el regalo de Reyes en la capital leonesa. Desmintiendo el tópico de que los festivales son para el verano, León disfrutó de tres días de la mejor música indie en todas sus variedades. «Estamos muy contentos con el transcurso de ... esta primera edición y ya esperamos a la segunda», afirma a este medio, Guillermo Mateo gerente de El Gran Café y uno de los organizadores de este evento.
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Con todas los entradas vendidas daba comienzo el 3 de enero el Vibra Mahou Fest con los murcianos Second encargados de abrir el telón. Esta banda, que llegaba como cabeza de cartel no defraudó a un público que puso la misma energía que ellos en el escenario. La banda llegó a León continuando con su intensa gira de presentación de «Anillos y Raíces», ofreciendo un recital de intensidad e espontaneidad que terminó con el frio que hacía en la capital leonesa. Espacio Vías fue testigo del buen momento que está llevando esta banda.
La fiesta continuó en El Gran Café con la sesión de la leonesa Jhana Beat. Solo le bastó la ayuda de una guitarra eléctrica y la capacidad innata de capacidad de producir ritmos de cualquier tipo, compases y sonidos musicales utilizando su propia boca, nariz, labios, lengua y voz. Utilizando la Loop Station que maneja con los pies, graba bases de beatbox y guitarra, mezclando todo a tiempo real, mientras impacta con su poderosa voz consiguió cautivar a su público. Una artista que armó en vivo sus propios temas y conocidas versiones, aportándoles siempre un sonido fresco y personal.
De cerrar la noche se encargó Kill Vir DJ quien dejó su cámara a un lado para ofrecer una sesión divertida que puso a bailar a todo el público de esta mítica sala de conciertos. La fotógrafa leonesa cerró una fiesta que ya presagiaba un buen festival.
El sábado empezó a ritmo de rock gracias a Embusteros. Con su potente directo cargado de potentes riffs y toques electrónicos puso las pilas a todos los asistentes para aguantar el día de música y diversión. Los leoneses Cheese & Bacon, con experiencia en grandes festivales a la vez que en la noche leonesa, consiguieron no descendiera el ritmo de la tarde.
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De nuevo en Espacio Vías, la noche la abrió Ginebras, una banda en la que reina el buen rollo, locura y el espectáculo. Este grupo formado por cuatro amigas ofreció un concierto 'con altura' en el que el público disfrutó hasta con 'las típicas canciones'.
El plato fuerte del sábado salía a escena. Amatría regresaba a León para despedir su gira de 'Algarabía' y presentar sus singles «Un alud» y «Un amor» que formarán parte de su nuevo trabajo. Joni Antequera demostró que León no es un escenario más, aquí hizo su primer 'sold out', y ese agradecimiento se lo hizo saber a los leoneses ritmo de pasión y entrega.
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De nuevo en El Gran Café para cerrar la noche. En esta ocasión con una sesión de Inmir, una DJ que ya ha pasado por cabinas de referencia nacional y festivales como el Arenal Sound o el Low Festival.
El domingo se cerraba el festival con la actuación Qverno, el nuevo proyecto musical formado por miembros de Morgan, Dinero, Trono de Sangre y Minor Empires. Un grupo que pese a su corta edad ya va marcando territorio y en León supo dejar huella.
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Mahou y El Gran Café se volvieron a unir para crear este proyecto musical que en su primer año ha causado buenas expectativas. Ahora le toca crecer y consolidarse en el tiempo pero lo más importante, la semilla musical, ya está sembrada.
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