«25 años después, el espíritu del Sonorama sigue vigente»

Si en 1998 le llegan a decir a Javier Ajenjo que su pequeño gran hijo cumpliría 25 años rodeado de más de 30.000 personas no se lo creería. Pero así será. El Sonorama Ribera celebra su 25º aniversario demostrando que es mucho más que un festival.

«La gente no imaginaba que Aranda de Duero pudiese tener un festival así. Recuerdo perfectamente la primera edición en la plaza de toros, ahora han pasado 25 años y mucha de esa gente sigue a nuestro lado, otra ya no está por diferentes circunstancias pero creo que el espíritu del festival sigue absolutamente vigente», apunta Javier Ajenjo, director del Sonorama.

El camino no ha sido fácil, de ahí que los éxitos se disfruten aun más. Aranda no tiene playa, ni las posibilidades de ciudades como Madrid o Barcelona, «aquí hay otras posibilidades y las aprovechamos al máximo». No tener grandes espacios habilitados hizo que tuvieran que conquistar las calles, cambiando la fisionomía de prácticamente todos los festivales de este país.

Ahora es el festival del abuelo y del niño porque no es un lugar en el que ir a ver conciertos es un sitio al que se va a vivir una experiencia. «En esta edición hemos hecho esa 'pool party' para esos jóvenes que salen del camping y se quieren divertir y el día de mañana serán los mayores que bajen a Aranda a comer un lechazo», explica de una forma simple Ajenjo.

Un festival que ha roto tabús, no solo por hacerse en «una tierra complicada» sino por ser un evento musical en el que tiene cabida todo el mundo mezclando lo más actual con grupos que han marcado una época como el Dúo Dinámico, Dhuncan Dhu o Mecano. «La gente se olvida de donde viene, no se puede renunciar a la música que escuchabas en el coche con tu padre», detalla.

Pero si de algo tiene que estar orgullo este festival es de haber visto crecer a los grupos. Un Mikel Izal que la primera vez que tocó en este recinto lo hizo en una pequeña carpa en la que los días previos se encargó difundir su concierto en el camping del Sonorama donde dormía, vio como años más tarde conquistaba la plaza del Trigo para este año ser uno de los cabezas de cartel. Una línea que han seguido bandas como La Moda, Carolina Durante, Shinova, Rufus T. Fire Fly y un largo etcétera.

Y es que la plaza del trigo tiene esa particular magia capaz de dar ese pequeño impulso que necesitan las bandas para dar el estirón.

Este año una de los grupos que pisaran este escenario serán los leoneses Zabriskie y solo el futuro sabe si en unos años volverán a este mismo lugar siendo alguna de las bandas que actúan después, unos de esos grupos consolidados que tocan por sorpresa llenando aun más ilusión este lugar. «En estos 25 años hemos ayudado a que pasen cosas bonitas, y eso es lo más gratificante», afirma el director del festival.

Y es que un 25 aniversario del Sonorma no se entendería sin sus grandes sorpresas. A parte del cartel que ya se ha hecho público, habrá «una plaza del Trigo increíble, un concierto aniversario con Charlie Bautista y un concierto impensable que dejará a alguno con el 'culo torcido'», detalla Ajenjo que añade que «parte del secreto es la discreción en las sorpresas».

Sonorama cumple un cuarto de siglo de música, gastronomía, fiesta pero sobre todo de crear grandes recuerdos, emociones y sensaciones únicas. Brindemos por las muchas historias que faltan por contar.

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