Muere Claude Montana, icono de la moda en los años ochenta

Montana conoció el éxito de manera fulgurante desde que fundó su marca en 1979. Concibió una silueta de la mujer que crearía escuela: grandes hombreras y cintura estrecha a la manera de un triángulo invertido. Dio carta de naturaleza al llamado 'power dressing', masculinizando a las mujeres y otorgándolas no solo una figura, sino una nueva y empoderada manera de presentarse ante el mundo. Hizo del cuero su tejido predilecto en todas sus colecciones y reconvirtió la moda militar en piezas de estilo punk. Sus desfiles eran acontecimientos sociales y su influencia es fácilmente detectable en diseñadores como Alexandre McQueen y Marc Jacobs.

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Nacido en París en 1947, Montana era hijo de exiliados –una alemana y un empresario textil catalán (su apellido paterno era en realidad Montamat) y se marchó de casa siendo adolescente ante la incomprensión de sus padres. Sobrevivió en el Londres de finales de los 60 creando bisutería de papel maché con pedrería de cristal y plástico. De vuelta a París, trabaja con el diseñador danés John Voigt.Su compañero de apartamento en aquellos años era Thierry Mugler, con quien acabó como el rosario de la aurora.

Grace Jones, Diana Ross, Inés de la Fressange y Cher son devotas de sus líneas andróginas y provocativas. Dice que no a Dior y acepta diseñar las colecciones de alta costura para Lanvin. Claude Montana vivió con naturalidad su homosexualidad, a pesar de casarse con la modelo estadounidense y musa Wallis Franken para que heredara su imperio. Su agitada convivencia con peleas, drogas y alcohol terminó con el suicidio de ella en 1996 saltando de un tercer piso. Al año siguiente llegó la bancarrota y el cierre.