Martín. Honorio. Por separado sería imposible encontrar un nexo de unión entre ambos nombres. Pero tiene su lógica, y su sentido.
Publicidad
El primero es Martín Muñoz Navarro, durante más de una década intendente jefe de la Policía Local de León. Un personaje sobradamente conocido en ... León capital, un tipo singular, apasionado de su profesión.
Martín siempre estuvo al 'pie del cañón' y siempre con la cautela y la prudencia que le ha acompañado durante todo su ejercicio profesional. Tan discreto fue que apenas le dio excesiva importancia al hecho de estar bajo la diana de ETA. «Cosas que pasan», decía entonces intentando exteriorizar una serenidad impropia de un mortal.
Pero junto a Martín siempre patrulló las calles de León su compañero Honorio. Nunca mostraba su cara, siempre pasaba desapercibido y nadie lo conocía. Honorio vivía dentro de martín hasta que ahora el exintendente jefe de la Policía le ha dado vida a través de una de sus pasiones: la novela.
Recién jubilado el máximo responsable de los agentes locales decidió dar entrada en escena a Honorio y a través de él ha dado vida a 'Azul y negro', su primera novela.
«Hay una ciudad luminosa y llena de vida que palpita en sus calles y en sus plazas y se recrea en su historia, en sus tradiciones y en sus monumentos, la catedral transparente, los recios y mágicos muros de San Isidoro, el sinuoso trazado de sus murallas medievales' que la hace entrañable para sus habitantes e irresistiblemente atractiva para cuantos la visitan», se remarca en la presentación del libro.
Publicidad
Pero hay otra ciudad «oscura, llena de maldad y odio, deshumanizada y terrible, donde desarrollan su trabajo los agentes de policía, y que solo ocasionalmente sale a la luz en la crónica negra de los medios de comunicación».
Y a partir de ahí toma el protagonismo el sargento Honorio de la Policía Local de León, personaje de ficción que conoce y vive en ambas ciudades. «Y con honestidad nos narra su trágica experiencia durante los últimos treinta años en nuestra ciudad, desde la detención del violador del chándal a la muerte de Isabel Carrasco», remarca.
Publicidad
Son veinte relatos en los que Honorio muestra en primera persona episodios imborrables de su carrera profesional, los más duros y los más rocambolescos. Historias de la ciudad que se esconden entre sus calles: ladronzuelos, prostitutas, crímenes sin escrúpulos... La vida, en realidad.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Te puede interesar
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.