El escritor leonés Gregorio Fernández repasa en su nuevo libro la historia y tradiciones de los pueblos leoneses

Y, de sorpresa en sorpresa, hay que destacar varios conceptos como la impresión (con páginas barnizadas para no dañar con el tacto las diversas fotografías) o las páginas trabajadas de forma manual, para pegar una pluma de los gallos del Curueño en cada ejemplar y el sobre que, también, se trabaja a mano: la dirección, el pegado del sello original, la estampación del matasellos y la inclusión de una tarjeta firmada por el autor. Los facsímiles que incluye (El Queso, El Passo Honroso –publicado en intonso– y El Concejo) son otro 'cantar' que se ha de evaluar con un enorme interés para el lector que ama y disfruta de la tierra titular del Viejo Reino.

Más de 400 páginas dan de sí. Tanto que en ellas uno se puede hacer una idea de lo que fue y sigue siendo León en toda su extensión, ya que más de trescientos pueblos, en mayor o menor medida, son tenidos en cuenta.

«León y provincia. Una mirada al pasado» se publica en gran tamaño para la colección «Los Libros de CamparredOnda formato XL». Su peso descomunal (2.640 gramos) no va a dejar indiferente a nadie. Y todo porque, como es natural, la cultura pesa y mucho. Solo hace falta que el lector se detenga y descubra como se merece un mínimo interés. Y, en este caso, lo tiene –lo podemos asegurar– antes de abrir el libro para después exclamar, sin duda alguna, «he descubierto una nueva joya de este autor de nombre Gregorio Fernández Castañón».

Autor que, lo recordamos, ya ha hecho grandes méritos con obras anteriores como «Juego de perros» (Premio Fray Luis de León), «Bajo el poder de las piedras» (Premio Libro Leonés del Años), la trilogía leonesa «El León de mi tejado» (premio Libro Leonés del Año), «Sangre de roble» y «Ríos de pasión y fuego» o, de la también trilogía, precedente a este su último libro y con las mismas características, «León tras las sebes de un ayer» (Premio Libro Leonés del Año), «Un Viejo León muy prestoso» y «León, entre recuerdos y añoranzas».