León... ¡Viva la magia!

Se esperaba un alto nivel a tenor de lo visto en años anteriores, y lo visto en el Auditorio de León no defraudó. La primera de las galas internacionales de León vive la magia llenó la platea leonesa de espectadores que disfrutaron con el ramillete de artistas que saltaron a las tablas.

Conducida la gala de forma maestra por Isaac Jurado, hizo gala de ser un showman sin licencia, un artista sin filtros. Haciendo valer su imaginación, frescura y grandes dosis de buen humor, se metió al público en el bolsillo entre actos, tirando de trucos de magia que supo realizar sin oscurecer las actuaciones de la gala.

Todo comenzó con el italiano Shezan, un mago que evocando los cuentos de oriente hizo de sus lámparas el mayor de los espectáculos. Así, consiguió convencer alternando grandes momentos de improvisación y trasladándolo a un profundo sueño de las mil y una noches.

Para los amantes de los clásicos también habría tiempo. James Dimmare, perfectamente vestido, creó Ilusiones increíbles con palomas y periquitos, pero con una diferencia significativa, todo diseñado alrededor de una persona fuerte, un estilo brillantemente original, y la incorporación de la música que casa a la perfección.

Pero sin duda uno de los platos fuertes iba de la mano de la china Huang Zheng, una de las pocas magas que ha recorrido el mundo con sus espectáculos. Sus efectos mágicos increíbles, fueron el hilo conductor para iniciar un apasionante viaje desde la china milenaria hasta las raíces más puras del flamenco.

Una gala que también contó con la magia rusa de Bastrakov en un número que llevó al público hasta el mismo imperio, con la sofisticación de Néstor Hato y la mágica voz de Marc Metral.

El nivel convenció y la gala dejo bocas abiertas, que son sin duda el mejor baremo para saber si la magia ha cumplido su objetivo.

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