'Lindalocaviejabruja', una obra para abordar la dificultad de ser mujer

La artista se apropia de los espacios y elementos cotidianos y los reconfigura para adaptarlos e integrarlos a su propio trabajo. De esta manera, Ramo quiere mostrar el momento en que los objetos dejan de tener sentido en la vida de las personas y se genera un momento de alteración donde se pierde el significado natural de los distintos elementos que nos rodean.

La ficción, la magia y la mitología son los elementos de ambiente que rodean la exposición de la artista. El objetivo es crear hilos narrativos que establezcan nuevos espacios temporales en los que los espectadores se cuestionen el por qué «vivimos en un mundo que está orientado a buscar el beneficio económico sin importar las consecuencias». La obra está ubicada en el edificio Sabatini del museo, en las salas de Protocolo y Espacio I.

La primera acoge la combinación del mobiliario con objetos cotidianos -para crear la idea del caos y del desorden como elemento creativo- y la segunda, la instalación y la proyección de un vídeo -dónde se puede observar un títere que amaga con golpear a su mujer en repetidas ocasiones y una bruja consumida por el fuego-. Este último elemento es el núcleo principal de la exposición.

La hispanobrasileña Sara Ramo nació en Madrid en 1975 pero un mes después se trasladó a Brasil con su familia donde ha desarrollado su carrera artística, en la que ha logrado estar presente en las bienales de Venecia y Sao Paulo.