Secciones
Servicios
Destacamos
El 28 de enero: Día Mundial por la Reducción de emisiones de CO2
La cadena de supermercados asturiana desarrolla medidas pioneras para reducir el impacto medioambiental en las seis provincias en las que opera
Una apuesta decidida por el cuidado del entorno. Alimerka, compañía asturiana de distribución alimentaria, desarrolla desde hace años importantes proyectos encaminados a reducir el impacto medioambiental de su actividad en provincias donde desarrolla su actividad en las seis provincias en las que opera. Las medidas implementadas han logrado reducir en los últimos 5 años más del 80% de sus emisiones de CO2. Esto les ha permitido adelantarse a los requisitos de la Legislación Europea sobre el Clima, que obligan a una disminución de estas emisiones en más de un 55% antes de 2030 y aspiran a la neutralidad climática antes de 2050.
Paula Díaz-Caneja, responsable de Calidad y Medioambiente de la compañía ha indicado que Alimerka «trabaja de manera decidida para reducir el uso de combustibles fósiles, tratando de hacer un reparto más eficiente con nuestra flota de camiones, con la planificación de rutas y el aprovechamiento de camiones para logística inversa y retornos, entre numerosas medidas. El medio ambiente y la reducción de emisiones son un valor estratégico para Alimerka y una forma de mostrar nuestro compromiso con la sociedad».
Alimerka fue la primera compañía del sector distribución en España en contar con un camión eléctrico. Ahora, dispone de una flota de 21 camiones eléctricos, 46 camiones de Gas Natural Licuado y 20 camiones híbridos, además de 26 furgonetas eléctricas para sus repartos de última milla. Es la flota más importante de España de estas características y top 5 de Europa. Camiones y furgonetas más silenciosos que minimizan la contaminación atmosférica y acústica en sus rutas para llegar a 171 tiendas repartidas por zonas rurales y urbanas.
Su estrategia de descarbonización ha sido reconocida recientemente con la cuarta estrella Lean&Green, que entrega la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (AECOC) a aquellas empresas que han logrado reducir la huella de carbono de sus procesos logísticos en más de un 55% en el último lustro. De esta manera, Alimerka se convierte en la primera y única empresa española en contar con este prestigioso reconocimiento.
No son las únicas medidas desarrolladas. Bajo ese compromiso, Alimerka ha lanzado otros proyectos de descarbonización, como la instalación de la mayor superficie fotovoltaica del norte de España en su centro logístico de Lugo de Llanera en 2019.
En ese sentido, la empresa se encuentra realizando mejoras y renovaciones encaminadas a la eficiencia energética y más del 60% de sus tiendas cuentan ya con iluminación led de bajo consumo eléctrico, que a su vez aporta ahorro en los equipos de climatización e instalaciones frigoríficas al reducir la carga térmica en los locales.
La compañía reduce sus emisiones a gran velocidad, pero también desarrolla proyectos para compensar aquellas que aún no han podido mitigar.
La pasada primavera, de hecho, la compañía plantó 24.200 árboles autóctonos (rebollos, abedules, pinos silvestres, cerezos y serbales de cazadores) en un terreno de 22 hectáreas en zonas degradadas por incendios en el concejo de Allande y adecuó dos hectáreas de pastizal para ganadería.
Esta acción, enmarcada en el Proyecto de Regeneración de Pastos para Uso Ganadero y Restauración Hidrológico-Forestal de la compañía, tiene entre sus objetivos la restauración de la biodiversidad y la creación de un entorno silvopastoril para aprovechamiento ganadero, reforzando a su vez el compromiso de Alimerka con el sector primario.
Esta medida se suma a la iniciativa desarrollada en 2021 con la plantación del Bosque Alimerka (4,5 hectáreas de especies autóctonas de Teverga y Quirós), en un área de especial relevancia para la conservación del urogallo y el oso pardo.
Alimerka complementa esos esfuerzos con otros compromisos. También trabaja contra el desperdicio de alimentos dentro y fuera de sus tiendas, mediante la donación de excedentes a entidades sociales a través de la Fundación Alimerka. Otro ejemplo es la colaboración continuada con el Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) al que donan partes no comerciales de vacuno generadas en las salas de despiece de carnicería.
La cadena de supermercados asturiana trabaja de manera global, además, en la prevención de residuos, en medidas de bienestar animal dentro de sus instalaciones y en la colaboración con otras entidades de protección de la biodiversidad. Es el caso del acuerdo con la Fundación para la conservación del Quebrantahuesos con el que apoya a los ganaderos de la zona de los Picos de Europa en sus prácticas de crianza naturales y respetuosas con el medio ambiente o el realizado con la Fundación Oso de Asturias en su labor de recuperación de esta especie singular del Principado de Asturias y de su hábitat.